Cargando...“Espacio vital es la muestra que trasciende los conceptos musical y plástico, en un estrecho diálogo cultural que no se presenta de forma sustancialmente visible sino a través de la inmersión activa del oyente receptor. Las piezas reunidas establecen un correlato entre las formas visuales de Sotelo y las sonoras del maestro Frank Fernández, obteniendo un tempo interno que no es gratuito, sino deudor de la tradición artística contaminante entre ambos dominios”.
Así comentó Elisa Álvarez Delgado, especialista en la obra de Jesús Lara Sotelo, con motiv de la apertura, el próximo domingo 5 de mayo, a las 4:00 p.m., en el lobby del Teatro Nacional de Cuba, de la muestra personal de pinturas, dibujos y cerámicas del reconocido artista de la plástica y escritor, quien bajo el título de Espacio vital dedicará esta exhibición al aniversario 60 de carrera artística y a los 75 años de vida del prestigioso músico cubano, maestro Frank Fernández.
La joven historiadora del arte precisó que “muchos artistas del siglo XX intentaron establecer los fundamentos del arte abstracto en la teoría musical, en especial, Vasili Kandinsky, quien se basó en la no-representación de los elementos básicos de la imagen para acceder a otro tipo de ideas, abstractas, proporcionales a la expresión abstracta que emitían sus obras. El sonido interior abstracto que abordó el creador ruso en correspondencia a las sensaciones que emanaban de las formas en la imagen, es muy similar a las vibraciones que se perciben en el arte de Jesús Lara Sotelo cuando este establece relaciones fecundas entre los sonidos que penetran por doquier en los intersticios de las formas visuales.
“Se manifiesta entonces —agregó— un genuino triunfo de la unidad, cuando la formulación de las perspectivas poéticas y su justificación estética se abren hacia otras posibilidades de expresión, que más allá de las confluencias y evocaciones, nos colocan ante los dominios de una música visual o de una plástica sonora”.
La exposición del prolífico creador de las artes visuales, además de compositor, servirá de pórtico a un Concierto-Gala con el que músicos y bailarines cubanos y foráneos celebrarán la existencia de Frank Fernández en el panorama de la música cubana contemporánea como uno de sus insignes creadores, reconocido con el Premio Nacional de Música (2005) y más recientemente como Doctor Honoris Causa por la obra de toda la vida en las universidades mexicanas de Morelos y Xapala (2019).
En el año 2013, a propósito de la exposición de retratos titulada Yo también sueño con serpientes, que Jesús Lara Sotelo dedicó a destacados músicos del panorama nacional, en especial a los integrantes del GESI, y de la presentación de su libro Domos Magicvs por el Premio Nacional de literatura César López y los reconocidos escritores Francisco López Sacha y Lina de Feria, dedicó un poema del propio libro al insigne músico cubano. Sobre este gran evento el maestro Frank Fernández expresó: “Esta es una bellísima, fuerte, energética y honda exposición sobre la música”.
“Alma beethoveniana fue el retrato del pintor que integró la exhibición. Se mostraba frente al piano y el verismo de la representación se disolvió en líneas de cortes que develaron interioridades y acortaron las distancias entre el maestro y el espectador. Pero no ha constituido este el primer acercamiento entre ambos creadores”, apuntó la también crítico de arte.
En el año 2007 Jesús Lara realizó la exposición titulada Sui Génesis, ocasión en que el célebre pianista le dedicó una pieza musical del mismo nombre. Posteriormente, inspirado en su banda sonora Tierra Brava, Sotelo creó una obra pictórica.
“Dos años más tarde —recordó Elisa— en 2009, inspirado en la vida y obra del artista, el maestro Frank Fernández compuso la obra Lara, un retrato musicalizado, como dijera el propio maestro; y en el año 2016 creó la pieza Epílogo, a propósito de los 25 años de carrera literaria de Sotelo, y este mismo año esrenó Espacio vital, dedicada al poemario Lebensraum, sobre la cual el narrador, crítico y poeta cubano Alberto Marrero, en un texto al respecto, afirmó, que la búsqueda de un espacio vital es siempre dramática y jamás lineal. A la par, la música del maestro ha inspirado un sinnúmero de piezas cerámicas y abstractas de Sotelo, como manifestaciones sensibles a estas ideas”.
Lara Sotelo, además de su trayectoria en las artes plásticas y en la literatura, ha intervenido también en el mundo musical. Al respecto, la especialista dijo: “Su pieza Tensión, misterio, tensión (2013), fue expuesta como partitura en la exposición Irla (XII Bienal de La Habana, 2015), nacida de la necesidad de explorar nuevas fronteras, nuevos índices interdisciplinarios que estuvieran en contacto además, con la tradición musical que vive en él, la cual hibrida a los clásicos (Mozart, Beethoven, Haydn) con sonoridades orientales y en especial con la que producen los cuencos tibetanos, los que aluden a una zona más íntima del mundo de Sotelo, que interviene también el plano de la meditación, del feng shui, del iaido, del tai chi, y de otros ejercicios que practica sistemáticamente donde todo guarda relación, en su arte, bajo la piel de la metáfora”.
En tal sentido agregó que sobre estos tejidos intrínsecos “se enarbola la instalación que da nombre a la muestra, como un espacio compartido entre el arte milenario de los arreglos florales, la cerámica, la sonoridad de los cuencos con el fluir de la plástica sonora que se concibe en el ambiente”.
Espacio vital estará compuesta por una selección de abstracciones, paisajes y retratos identificativos de la vocación iconográfica de Lara Sotelo. “Es este un arte que adquiere musicalidad propia, quizás, por el sonido interior abstracto al que refería Kandinsky y por la introducción de elementos musicales en el mundo de las imágenes y de las palabras. La secuencialidad de las ideas transmitidas, las coherencias intelectivas orientan a Espacio vital hacia un particular espacio poético. Porque, ¿acaso la poesía no busca cada vez más aproximarse al universo de la plástica y de la musicalidad? Esta exposición tiene mucho de esa poesía, nacida de los vínculos creativos que han enlazado, por décadas, a dos grandes exponentes de la cultura cubana”, dijo Álvarez Delgado.
La muestra estará emplazada hasta las primeras fechas del mes de junio en la Sala Avellaneda del Teatro Nacional de Cuba donde las palabras, la música y las imágenes de Jesús Lara Sotelo extienden la celebración que disímiles artistas dedican a las seis décadas de continua creación del maestro Frank Fernández. Una muestra construida desde la diversidad de ambas creaciones.
