El cambio climático puede conducir en el futuro a extinciones masivas de pingüinos en la Antártida de acuerdo con las conclusiones de una investigación realizada por la Universidad de Ciencia y Tecnología de China.
Tras examinar unas colonias abandonadas de estas aves en la parte oriental del continente helado, los científicos constataron que hace unos 200 y 750 años se produjeron allí dos episodios en los que una gran cantidad de pingüinos murieron de manera casi simultánea.
El análisis de los restos de los animales llevó a la conclusión de que la causa de esta elevada mortalidad fueron unas fuertes precipitaciones, anormales en estas latitudes.
El estudio, divulgado a finales de septiembre, alerta que en el contexto actual de cambio climático, los fenómenos meteorológicos extremos de este tipo son cada vez más frecuentes en la Antártida, lo que se traduce en una amenaza cada vez mayor para la sobrevivencia de la mencionada especie.
Pero la muerte masiva de pingüinos en esta región del planeta como consecuencia del cambio climático es un hecho de actualidad, debido a que el derretimiento de los bancos de hielo impacta en su hábitat y el calentamiento de agua influye en la disponibilidad de su alimento, así lo confirman estudios realizados por el Centro Nacional de Investigación Científica de Francia con el apoyo del Fondo Mundial para la Naturaleza, divulgados el pasado año.
Expertos de ambas entidades que estudiaron desde el 2010 una colonia de 18 mil parejas de la especie en el este de la Antártida, descubrieron que durante la temporada de reproducción comprendida desde finales del 2016 hasta principios del 2017, solo dos crías sobrevivieron. Miles de los pequeños pingüinos murieron de hambre debido a que la inusual expansión de la banquisa (hielo marino flotante) provocada por el calentamiento global forzó a los padres a irse más lejos que lo habitual para buscar el alimento.