La Unidad Empresarial de Base Calixto Sarduy, Muebles Ludema en el ámbito empresarial cubano, de Las Tunas, recibió la bandera Proeza Laboral, que, a propuesta de los sindicatos, otorga el Secretariado Nacional de la CTC a colectivos con excepcional desempeño.
A los trabajadores de esta unidad, la organización obrera les reconoce la rehabilitación, en tiempo récord, del mobiliario de 13 instalaciones turísticas de Cayo Santa María, en el norte de la provincia de Villa Clara, seriamente afectadas por el impacto del huracán Irma, en octubre del año pasado.
El joven ingeniero Industrial y máster en Administración de Negocios, Karlier Cano Rodríguez, quien fungió como jefe de la brigada que apoyó los trabajos de recuperación en ese territorio, confirma que, en solo 34 días, de los meses de octubre y noviembre, fueron reparados o repuestos 10 mil 136 muebles en esos hoteles.
Dice que hasta los predios impactados por el poderoso meteoro en esa región del centro de Cuba llegaron los 12 tuneros: carpinteros, ayudantes, pintores y otros operarios conscientes de la importante misión, pues ya el país preparaba su logística de cara a la temporada alta del turismo internacional.
Y abunda que a la comitiva se integraron colegas de las UEB Madesa (Santiago de Cuba) y Muebles Imperio (Guantánamo).
Luis Cruz Ortiz, secretario general del Buró Sindical de la unidad, confirmó que los miembros del grupo de apoyo a la restauración de los efectos del ciclón, y los que quedaron en la fábrica, tenían la firme convicción de trabajar duro con el propósito de evitar la importación de los muebles necesarios para garantizar los servicios de esos centros turísticos.
El valioso estandarte lo recibieron el director general de la UEB, ingeniero Olmedo Roja Chin y Luis Cruz Ortiz de manos de Emilio Pérez Estrada, miembro del Secretariado Nacional del Sindicato de Industrias; y, María Antonia Amado Fajardo, del Secretariado Provincial de la CTC.
Pérez Estrada significó que con esa actitud los trabajadores de este colectivo respondieron al llamado del General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, para poner a funcionar los hoteles con vistas a la temporada alta del turismo en el país.
Dijo que esos resultados fueron posibles por el empeño, dedicación y la eficiencia con que laboraron todos los trabajadores de esta industria en jornadas diaria de más de 10 horas, incluyendo sábados y domingos, en respuesta a la política económica y social del Partido y la Revolución, aprobada en el VI Congreso del Partido y ratificada en el VII.