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El resultado del examen del Anteproyecto de Ley Código de Trabajo en los hoteles Meliá Las Américas y Bella Costa confirmaron las tendencias dominantes entre los trabajadores del polo turístico de Varadero, el principal destino de sol y playa de Cuba, a 140 km de La Habana.
En las sesiones sindicales de los dos centros del grupo CUBANACAN, los afiliados propusieron corregir una resolución no derogada en la nueva propuesta, vinculada con la separación del sector, medida que limita su apelación a instancias administrativas y no jurídicas, pues solo se puede reclamar a la entidad provincial a la que pertenece el sancionado y como último recurso al Ministerio de Turismo.
La separación del sector para quienes ocupan puestos en la llamada industria del ocio impide recurrir a los órganos de justicia laboral (OJL) y los tribunales, lo que constituye una administravización del Derecho, reconocieron expertos en el tema presentes en las discusiones.
María de la Caridad Rodríguez, secretaria general del Buró Municipal del Sindicato de Hotelería y Turismo en Cárdenas, lamentó los muchos trabajadores valiosos que se han perdido por culpa de una resolución que los trabajadores solicitan se corrija con la posibilidad de que estos procesos especiales pasen por los tribunales, los únicos competentes para determinar si hay o no culpabilidad.
Tal y como ha sido el comportamiento en asambleas precedentes, en las del Meliá Las Américas y en Bella Costa unánime aceptación tuvo el planteamiento del Anteproyecto de ampliar a cinco o a siete los tres miembros con los que hoy cuentan los OJL.
Sin embargo, reconocieron que para la solución de los conflictos laborales prefieren lo legislado en el código aún vigente, y propusieron suprimir la introducción de un escalón intermedio, la figura del jefe administrativo del que impuso la medida, ante el cual, después de la decisión del OJL, se apelarán únicamente la separación definitiva de la entidad y el traslado a otra plaza con pérdida de la anterior.
“Esa nueva figura dilatará de manera innecesaria el proceso de reclamación”, aseguró Nelson Ruiz, secretario del Buró Sindical del Meliá Las Américas, hotel donde también se reclamó la necesidad de que los OJL retornen a instalaciones mixtas como estas, de donde fueron desplazados hacia las agencias TUREMPLEO y “allí lejos están de cumplir de forma eficaz sus funciones”.
Con mucha fuerza se defiende en Varadero el derecho a trabajar con régimen de 24 y no de 26 horas como sucede en la actualidad para el caso de ellos, que sean los directores de los hoteles quienes decidan qué horarios aplicar en sus empresas y no los organismos nacionales, y que se reconozcan con retribuciones salariales las horas extras que realizan.
Empleadas como Mariela Jorge solicitaron que a Varadero se mire con otros ojos. “Los que entramos en el turno de las 7 de la mañana abordamos la guagua de las 4 y 50 de la madrugada, llegamos a las seis al trabajo y nos ponemos a trabajar sin descanso hasta que terminamos a las tres de la tarde, en vez de ocho horas laboramos nueve, y ese tiempo donde creamos trabajo no se nos paga”, aseguró.
Oria Moliner Pavón, del Comité Provincial de la CTC en Matanzas, destacó la sabiduría con la que los hombres y mujeres del polo turístico han propuesto modificaciones, adiciones y supresiones al Anteproyecto de Ley Código Trabajo, muestra evidente, precisó, de lo bien que se han preparado para asumir este trascendental momento, previo a las sesiones finales del XX Congreso de la Central de Trabajadores de Cuba.
