Cuando el IV Campeonato Nacional de Béisbol sub-23 está a punto de entrar en su último tercio, lo más interesante dentro de un mar de bostezos y solitarios estadios, es la lucha por la clasificación de la zona occidental, pues en el oriente todo parece estar decidido con dos conjuntos escapados: Santiago de Cuba y Camagüey.
No vamos a volver sobre el tema del espectáculo de esta justa, pues las variables que inciden siguen siendo muchas y no todas solucionables por más que se quiera hoy. Desde el incómodo horario vespertino hasta el poco conocimiento de los jugadores por parte de la afición; desde la pésima defensa hasta fallidas estrategias de dirección, la lid sobrevive por un objetivo mayor: seguir buscando talentos y jugar, jugar mucho béisbol.
Cerca de 200 nombres de estos muchachos harán equipos de sus provincias para la 57 Serie Nacional, aunque antes quizás entre 10 y 15 resulten estimulados para participar en la venidera Liga Can-Am, como parte de la selección cubana que hará su incursión del 8 al 29 de junio en ese certamen para celebrar 21 partidos.
Esta formación —cuyo mánager debe salir entre Roger Machado y Víctor Mesa— se dará a conocer esta semana para concentrarse por 15 días y prepararse no solo con vistas a ese exigente torneo, sino también para el tope bilateral contra EE.UU. (1 al 8 de julio).
Tras la contratación esta semana de 10 peloteros para ligas canadienses: Yurisbel Gracial, Yordan Manduley, Lázaro Blanco, Alexander Ayala y Miguel Lahera estarán en la Can-Am, junto a Julio Pablo Martínez, que se incorporará más tarde por demoras de visado; así como Yorbis Borroto, Yulexis La Rosa, Ian Rendón y Noelvis Entenza para la liga interestatal, la nómina antillana pudiera contar en su mayoría con rostros muy jóvenes, sin dejar a un lado algunos experimentados.
Ariel Martínez, Leonel Segura, Norel González, Ulfrido García, Dariel Góngora, Yolbert Sánchez, Eliecer Griñán, Lionard Kindelán, César García y Yosver Zulueta son algunas caras de la sub-23 que pudieran vestir el uniforme de Cuba, acompañados de varios integrantes del equipo al IV Clásico Mundial como Guillermo Avilés, Yoelkis Céspedes, Víctor Víctor Mesa, Jefferson Delgado, William Saavedra, Yoanni Yera, Frank Camilo Morejón, Osvaldo Vázquez, Vladimir García, Alaín Sánchez y Carlos Benítez.
Sería bueno tomar en cuenta también a Dainier Gálvez, Dennis Laza, Yasiel Santoya, Erlis Casanova, Yoalkis Cruz y Yordanis Samón, con notables resultados en la pasada temporada y que no hicieron a la postre la selección nacional, pero en el inicio del actual ciclo olímpico pudieran ser estimulados.
De cualquier manera, lo más importante será nutrir ese conjunto de jóvenes con potencialidades. No incluyo en esta propuesta a Liván Moinello, Roel Santos y a Oscar Luis Colás (este último santiaguero de 19 años) porque deben ser firmados en los próximos días para la liga profesional de Japón.
Similar idea pudiera seguirse también para el torneo de Holanda de este año, pero habrá tiempo para valorar entonces a los candidatos.
Acerca del autor
Máster en Ciencias de la Comunicación. Director del Periódico Trabajadores desde el 1 de julio del 2024. Editor-jefe de la Redacción Deportiva desde 2007. Ha participado en coberturas periodísticas de Juegos Centroamericanos y del Caribe, Juegos Panamericanos, Juegos Olímpicos, Copa Intercontinental de Béisbol, Clásico Mundial de Béisbol, Campeonatos Mundiales de Judo, entre otras. Profesor del Instituto Internacional de Periodismo José Martí, en La Habana, Cuba.