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Por Orestes Eugellés Mena
En la sede de la Asociación Cubana de Naciones Unidas (ACNU) en La Habana, tuvo lugar el homenaje de recordación al ex canciller de la dignidad Raúl Roa García por celebrase este martes el Aniversario 110 de su natalicio.
La ceremonia se realizó en el parque de la dignidad de dicha institución donde amigos, compañeros de trabajo y familiares depositaron ofrendas florales ante el busto erigido al destacado intelectual, diplomático y revolucionario cubano, y al de otras figuras destacada, como Manuel Tello Baurraud, Guillermo Torriello Garrido, Ignacio Luis Arcaya y Manuel Porras.
Fermín Quiñones Sánchez, Director de la ACNU, destacó la estirpe mambisa y profundo pensamiento martiano y antiimperialista de Roa quien constituyó el enlace simbólico entre la Revolución del 30 y el proceso revolucionario iniciada por Fidel, cuando fue designado Ministro de Estado y posteriormente, denominado como Ministro de Relaciones Internacionales.
Quiñones explicó cómo Raúl Roa desde dicha responsabilidad defendió la naciente Revolución cubana frente a las maniobras injerencistas de la OEA y de la dominación imperial que esta profesa, a la que muy acertadamente catalogó como Ministerio de Colonias.
Como colofón del homenaje al canciller de la dignidad, seguidamente se efectuó un coloquio sobre sobre su vida y obra en la que participaron Ricardo Alarcón de Quesada, Oscar Fernández Mel, Manuel Yepes, Eduardo Delgado Bermúdez, entre otras personalidades, quienes contaron anécdotas y experiencias de quien fue vanguardia de la juventud cubana de su época.
Ricardo Alarcón expresó que para las actuales y futuras generaciones de cubanos Raúl Roa García seguirá siendo el canciller de la dignidad, por su autenticidad personal, valentía y firme defensa de la Revolución cubana.
En estos días adquiere vigor el ideario de Roa y su firme postura en la OEA, ya que esa organización retoma con fuerza su función injerencistas y servil, cuando intenta desestabilizar a la hermana República de Venezuela.
Hace exactamente 56 años, Raúl Roa García protagonizó una incansable batalla en naciones Unidas para denunciar la invasión mercenaria por Playa Girón.
El aquel momento, el canciller cubano batalló con su verbo hasta que Cuba fue escuchada a pesar de las mentiras de la delegación estadounidense, las que supo refutar con la genialidad que siempre le caracterizó, demostrando que la invasión había sido organizada y entrenada por la CIA con la complicidad de gobiernos títeres de Centroamérica.
