Los cubanos estamos acostumbrados a presenciar eventos de lujo en nuestros predios. Los torneos internacionales de lucha Granma-Cerro Pelado se inscriben por derecho propio en esa larga tradición. A la edición 50 de estos certámenes –por los cuales desfilaron en el pasado luminarias de diversas latitudes- acudieron representantes de una docena de países, con el propósito de aprovechar al máximo la posibilidad de contender entre gladiadores muy bien rankeados en varias categorías.
En la jornada inicial, celebrada este domingo 19 en el Coliseo de la Ciudad Deportiva, los anfitriones tomaron la delantera con dos títulos en el estilo clásico. En los 59 kilogramos, en una final entre peleadores japoneses, el subcampeón olímpico de Río de Janeiro Shinobu Ota venció de manera cerrada a Kenishiro Fumita. Ota lució inmenso en la Ciudad Maravillosa hasta que se topó en la disputa del oro con el santiaguero Ismael Borrero, quien no se presentó ahora por lesión. Los antillanos Luis Alberto Horta y Javier Duménigo se llevaron metales bronceados.
En los 71 kilos el pinareño Yosvany Peña derrotó 1-0 al habanero Henry Coello en el combate conclusivo, mientras que Fernando Vicente, de México, se agenció uno de los terceros escaños.
En los 80 kg el estadounidense Geordan Speiller aguantó el repunte del holguinero Antonio Durán y se quedó con el oro. Ambos exhibieron gran preparación física.
En los 98 kilogramos los espirituanos Reinier Díaz y Reinier Monteagudo se enrolaron en una cerrada porfía que concluyó a favor de Díaz 2-1. En este peso el chino Zhai Ninchao doblegó espectacularmente por pegada al cubano Gabriel Rosillo y se incluyó en el podio de premiaciones.
Esta importante competición se extenderá hasta el 24 de febrero, con acciones también entre las féminas y los exponentes del estilo libre.