El balance anual realizado por la Empresa de Diseño Ciudad Habana –la emblemática DCH- deviene en reflexión colectiva en los propósitos de un colectivo de profesionales y trabajadores que tiene sobre sí la proyección de diseños de obras, algunas tan polémicas como el nuevo rascacielos construido en el Vedado; pero que demuestra las razones para continuar su labor imprescindible en el desarrollo de proyectos urbanísticos en la capital cubana.

Según explicó Teresa Luis Rojo, directora general, «el 2024 resultó extremadamente difícil debido a las presiones sostenidas e incrementadas por el gobierno de Estados Unidos contra nuestro país; sin embargo, lograron realizar un plan de producción que supera los 57 millones de pesos; mientras que en la preservación del entorno se alcanzó renovar la certificación del Sistema Integrado de Gestión en Calidad y Medio Ambiente”.

Las directivas para el año en curso establecen desarrollar una estrategia que permita alcanzar niveles competitivos y la mejora continua en la informatización de los servicios; enfocarse a nuevos mercados y potenciar la implementación y seguimiento del sistema integrado de gestión, ciencia, innovación y desarrollo, entre otros objetivos definidos como parte del avance de la entidad durante todos estos años.
Lizette Labrador Armas, especialista en presupuesto, con más de tres décadas de labor en la DCH, y secretaria del Buró Sindical: “hemos mantenido la cohesión de nuestros profesionales y trabajadores; a partir de un trabajo personalizado del sindicato con cada trabajador.

De esa forma contribuimos a superar los momentos difíciles, sobre todo el apoyo ante las inquietudes y la importancia de mantener ese vínculo que nos permite contribuir, desde la cuota sindical, con un porcentaje de nuestro salario.
“Trato de aprovechar al máximo la jornada laboral y en horas de la tarde, ya en el hogar, dedico dos horas más para organizar mis labores al frente del sindicato, en una empresa con 37 años consecutivos de Colectivo Vanguardia Nacional. Es una satisfacción que demuestra el prestigio logrado con la eficiencia de una labor sostenida.
“¿La familia en el hogar? Tengo una hija que es doctora y cirujana, Laura Argote Labrador. Es un ejemplo de lo que se logra cuando la familia apoya lo que hacemos, cada uno, en su puesto de trabajo”.
“Trato de aprovechar al máximo la jornada laboral y en horas de la tarde, ya en el hogar, dedico dos horas más para organizar mis labores al frente del sindicato, en una empresa con 37 años consecutivos de Colectivo Vanguardia Nacional. Es una satisfacción que demuestra el prestigio logrado con la eficiencia de una labor sostenida.
“¿La familia en el hogar? Tengo una hija que es doctora y cirujana, Laura Argote Labrador. Es un ejemplo de lo que se logra cuando la familia apoya lo que hacemos, cada uno, en su puesto de trabajo”.