Uno de los sucesos más felices y fecundos en la historia de nuestra nación se reeditó con el paso de la Caravana de la Libertad por la occidental provincia de Matanzas, un suceso que convocó a combatientes del Ejército Rebelde a jóvenes y trabajadores.
Honrado con una gala político-cultural, el histórico hecho sucedió el 7 de enero de 1959, cuando a las 10 de la noche Fidel y sus barbudos llegaron al céntrico Parque de la Libertad para transmitir un mensaje de aliento y esperanza.
En este mismo sitio, 66 jóvenes destacados de la Salud Pública, la Educación, la Agricultura, de la termoeléctrica Antonio Guiteras, del Misterio del Interior y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias irrumpieron en la ceremonia enarbolando banderas, en un claro mensaje de que la Revolución perdurará para siempre, aseguró Rachell Tornés, de la Universidad de Matanzas.
Yosiel Olivera Ortega, primer secretario del Comité Provincial de la Unión de Jóvenes Comunistas en Matanzas, afirmó que la mayor fortaleza del proceso revolucionario radica en la misma unidad que cambió la realidad cubana aquel primero de enero de 1959.
Un momento especialmente emotivo lo fue el homenaje a quienes formaron parte de aquella victoriosa Caravana de la Libertad, que como entonces, inició su entrada a Matanzas por el municipio de Los Arabos, para continuar su paso por los territorios de Colón, Perico, Jovellanos, Coliseo, Limonar y otras zonas ubicadas en la Carretera Central.
Mario Sabines Lorenzo, primer secretario del Comité Provincial del Partido (PCC), presidió la gala, donde se entregó el carné de la Unión de Jóvenes Comunistas y del PCC a nuevos miembros.