Sin “colorete”

Sin “colorete”

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El comercio minorista en el Municipio Especial Isla de la Juventud recauda hasta finales de octubre 358.3 millones de pesos de la Circulación Mercantil Minorista (CMM), de un plan anual ascendente a 587.8 millones, según dio a conocer Danay María Mingorance Oliva, directora de Economía y Planificación del territorio.

 

Cumplir el plan de Circulación Mercantil Minorista en la Isla se traducirá en mayor satisfacción del pueblo. Foto: Yoandris Delgado Matos

Tal problemática aparece en la agenda de gobierno de manera permanente, pues reducir el déficit presupuestario en Cuba es una de las acciones prioritarias, contenidas en las Proyecciones de Gobierno para corregir distorsiones y reimpulsar la economía.

De ahí el énfasis de continuar buscando y explotando las reservas que aún existen en los territorios para incrementar, tanto como sea posible, los ingresos al presupuesto local, y disminuir los gastos innecesarios.

Al duro y sin guante

Se trabaja por ver la efectividad de las ventas realizadas por la Empresa Municipal del Comercio y la Gastronomía y sus diferentes estructuras, para, garantizar, la comercialización de forma minorista, de productos alimenticios, industriales, de construcción y agrícolas; la prestación de los servicios gastronómicos en cafeterías, restaurantes, casas especializadas, centros nocturnos.

Además, en su red de alojamiento y recreación, los servicios técnicos personales, con los atelieres, talleres, zapaterías,
autoservicio, fundamentalmente para la población y organismos autorizados en la ejecución del Plan de Negocios concebido en pesos cubanos.

Influencia social

Con el pie en el estribo están los diferentes colectivos por cerrar el 2024 con un estimado cercano a lo pactado: el 74 por ciento, pues si bien es cierto que cumplir tiene un impacto social, traducido en mayor satisfacción del pueblo; también recae en lo económico, al dar estabilidad financiera por su poder recaudatorio, no existir excedente circulante en la población y, a su vez, se ingresa al presupuesto del Estado.

 

Foto: Yoandris Delgado Matos

De más está decir, que con dichos “dineros”, el territorio puede dar respuesta a actividades sociales, díganse las generadas en la Cultura, el Deporte, la Educación, la Salud Pública, los Servicios Comunales y otras.

Las causas del incumplimiento hasta la fecha de la CMM tienen múltiples aristas, algunas objetivas, otras subjetivas, pero si algo es bueno resaltar, entre las acciones para “llegar” por encima del 70 por ciento, es el uso de las pasarelas de pagos digitales en las unidades del comercio y la gastronomía.

Entre los elementos objetivos, sobresale la inestabilidad de los ciclos de distribución de los productos de la Canasta Familiar Normada, casi totalmente importada, dado, en lo fundamental, por las restricciones financieras, el incremento de los precios en los últimos años y problemas operacionales que han causado atrasos en los arribos de importación, la producción y transportación.

También pesa la disponibilidad de combustibles, de equipos de transporte y el coeficiente técnico de estos, tanto terrestres como navales, que requieren de mucho financiamiento y el recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba.

Se suma, a los argumentos palpables, la inestabilidad en las ventas por el programa de materiales constructivos y el de los servicios técnicos, transversalizadas por iguales causas descritas anteriormente.

Y se agrega la disminución de los comensales por diversas causas, dato concebido dentro de los ingresos a obtener. “En enero teníamos, por dato de oficoda, 73 922, ahora hay 72 018 con una diferencia de 1 904”, aclaró Danay María Mingorance Oliva, directora de Economía y Planificación del territorio.

 

¿Qué depara el 2025?

 

Foto: Yoandris Delgado Matos

Las proyecciones de trabajo para el venidero periodo hablan de solidez y más organización para cumplir con el plan de CMM, cifra que debe ser inferior, teniendo en cuenta los establecimientos arrendados a las nuevas formas de gestión no estatal, cuyos resultados contables no conformarán ese total, según explicó Rafael Meriño Collazo, director de la Empresa Municipal de Comercio y Gastronomía, en la Isla de la Juventud.

Acompañado de la calidad de los servicios y con parámetros de eficiencia superiores a los obtenidos en el 2024, reordenar mejor la actividad comercial, rescatar tradiciones con unidades especializadas, instaurar mantenimientos de centros en deterioro, automatizar los procesos de gestión, perfeccionar el sistema de control interno, completar las plazas de cuadro vacante y un mayor acercamiento a las necesidades de la población.

Apuntes para un final

De cara al 2025, donde se avecinan restricciones en los gastos corrientes de la actividad presupuestada y no presupuestada, con respaldo de inversiones materiales, con prioridad para el programa de la vivienda, así como los sectores de Educación y Salud, se nos va la vida cumplir con los ingresos pactados, por concepto de la CMM, por el bien del Municipio y del país.

Constituye una premisa hacer de este tema un leit motiv de cuantas reuniones sean necesarias, donde se impone, exigir, declarar cada venta, para cumplir los valores de comercialización aprobados, los cuales, de hacer esto una práctica sistemática, deben guardar relación con el efectivo depositado en banco por concepto de venta, así evitamos “enmascaramientos” en ajustes contables no sustentados en las cuentas ni en operaciones.

Toca actuar, a cada sección sindical, sin “colorete” en las asambleas de trabajadores, para que la CMM se vista de largo y lleguen a las arcas del Estado lo acordado; “corregir” el tiro y evitar que sigan reinando los incumplimientos, debe estar, en la agenda de debate laboral, donde se hable de cuánto hacer para corregir distorsiones y reimpulsar la economía.

Qué mejor escenario para aprovecharlo y desde el quehacer sindical, involucrar más a la masa obrera, para alcanzar la
estabilidad macroeconómica del país, incrementar y diversificar los ingresos externos, avanzar en el desarrollo del sistema empresarial y la integración de actores económicos, además de reducir el delito, la corrupción, ilegalidades e indisciplinas sociales. Se impone “colorear” más los espacios sindicales.

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