Aún visten sus uniformes de estudiantes de Medicina o Enfermería, pero van a los hogares maternos o a las casas de gestantes con la misma responsabilidad que irían si tuviesen el título académico anhelado.
Varias fotos de la Universidad de Ciencias Médicas de Holguín (UCMHo) los muestran en diferentes municipios ofreciendo charlas a embarazadas adolescentes, auscultando a bebés, conversando con gestantes de alto riesgo…
El Programa de Atención Materno Infantil (Pami) cuenta en Holguín con el apoyo del estudiantado de las Ciencias Médicas, en respuesta a las orientaciones del Ministerio de Salud Pública para fortalecer la prevención de la morbilidad materna infantil.
De acuerdo con datos ofrecidos por Flor Elen González, vicerrectora general de la UCMHo, para cumplir esa importante labor la Casa de Altos Estudios diseñó un plan de acciones que ha permitido la visita a 725 embarazadas y 872 lactantes, así como la hospitalización de 236 gestantes de alto riesgo obstétrico, de las cuales 92 son adolescentes.
Entre las iniciativas que han posibilitado esos resultados se cuentan la vinculación directa de los educandos a las áreas de salud; el apadrinamiento individualizado a cada gestante y lactante de riesgo; la contribución para lograr el ingreso de embarazadas de 36 semanas que viven e lugares de difícil acceso; y la incorporación de los residentes de las especialidades vinculadas al Pami al cumplimiento de esas acciones.
El trabajo, en el que participan también profesores, de acuerdo a la planificación docente, ha permitido igualmente que hasta la fecha se hayan ejecutado más de 570 actividades de promoción de salud.
Para asegurar un control adecuado y la información sobre el impacto de estas acciones, cada sede de la universidad ha designado un profesor encargado del seguimiento y reporte diario.