Taipei.- Cuando resta menos de medio día para saber si Cuba sobrevive o se despide definitivamente del Premier 12, no son pocos los que piden al periodista una valoración final, imposible de hacer porque restan tres juegos en los que la única opción es ganar y ganar para mantenerse con un hálito de vida. Y cualquier historia coincidente con lo sucedido en el V Clásico Mundial (2023) no es pura casualidad.
El rival de este 16 de diciembre será Australia, uno de los cuatro equipos que hemos podido vencer en estas lides, aunque por la mínima (3-2) en 2019. Para este decisivo desafío el mentor Armando Johnson y su cuerpo técnico apostarán al talento de 19 años recién cumplido, Darío Sarduy, para abrir un juego que signficará en lo personal su debut en una selección nacional de mayores. Y la verdad es que no había muchas más opciones, o era él o Raymond Figueredo, a quien parece le encomendarán el cotejo del sábado contra Japón.
Por supuesto, cambios que pedían a gritos la afición también podrán verse. Roel Santos se mantiene como hombre proa, Yadir Drake sube al segundo turno tras la lesión todavía de Yoan Moncada en su mano por el pelotazo recibido contra Corea, que no le permite hacer un swing fortalecido. Yoelkis Guibert también asciende al importante tercer madero y queda por ver si no pasa como en la gira preparatoria, que al subirlo a la parte delantera no rondaba igual.
Alfredo Despaigne en rol de designado se preserva como cuarto bate de la tanda, al igual que el inicialista Ariel Martínez un escalón más abajo; mientras el torpedero Erisbel Arruebaruena desciende al sexto turno para ver si reacciona ante su soledad de 9-0 en los dos primeros juegos. La entrada más solicitada llega en el séptimo escaño con el receptor tunero Rafael Viñales, en tanto Yadil Mujica vuelve a su posición de camarero con Jeans Walter cerrando los nueve hombres y listo para defender la tercera base.
¿Es esto lo mejor que podemos tener hoy? ¿Serán suficientes y harán los ajustes pertinentes para enfrentar a una Australia que dejó en apenas un hit al equipo dominicano la víspera? ¿Cambiará la cara en cuanto a producción de carreras y que aparezcan los batazos oportunos? ¿Si Dario hace la hombrada desde el box por cinco o seis entradas habrá relevista capaz de tirar tres inning para preservar el triunfo y respirar todavía para la ronda decisiva?
Gracias al colaborador Néstor Del Prado Arza le explico las opciones matemáticas de Cuba para quedar entre los dos primeros todavía del Grupo B (ya por el A alcanzaron los boletos Venezuela 4-1 y Estados Unidos 3-2), algo bien complicado de entender desde las posibles combinaciones de números y ecuaciones matemáticas. Quedan 8 pleitos por celebrar en este apartado, tras los éxitos de Australia y Japón este jueves sobre Dominicana y Corea, respectivamente.
La versión más optimista es que Cuba logre tres victorias (Australia, Japón y Taipei de China) y que coreanos y quisqueyanos terminen la ronda clasificatoria con 2V y 3D, es decir por debajo del 3V y 2D que pudieran alcanzar los nuestros. Ya cualquier otra combinación nos dejaría fuera de avanzar hacia Tokio, sede la final, y dando por descontado que Japón el único juego que pudiera perder es el que disputen contra los nuestros el sábado, en tanto Taipei de China sucumbiría ante ellos y nosotros.
Fuera de esa variante matemática no se antepone o pospone ninguna otra, de ahí que reiteramos: ganar y ganar es la verdadera opción de Cuba, cual regalo a sus seguidores. Según el propio Néstor, las posiblilidades de esta remontada cubana están sobre el 12,5 % por ciento. Así que hay que ser realista. Estamos con el espinazo pegado a la pared, pero mientras se respire, hay que apostar a los nuestros.
Luego daremos todas las valoraciones finales. Las que vimos, las que no se ven, las que necesitamos cambiar como proceso dialéctico y las que el pueblo con su sabiduría popular ya tiene.
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