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Desde Pinar del Río, con batas, cascos y motosierras para sanar en Artemisa y La Habana

Entre las primeras imágenes que circularon en redes sociales mostrando los daños que dejaba el huracán Rafael a su paso, estuvieron instantáneas de centros hospitalarios con menoscabo en su estructura.

 

Eliminar los árboles que obstruyen las vías de acceso es una de las prioridades en las labores de recuperación. (Foto de Jaliosky Ajete)

 

Razón por la cual en Pinar del Río se incrementaron 18 posiciones para la atención a pacientes graves, cuatro pediátricas y el resto en los clínicos quirúrgicos, informó Sandra Ramírez Guzmán, directora general de Salud en la provincia.

Otros servicios con capacidades de ingresos son: coronarios, medicina interna y cirugía, también están listas cuatro brigadas con intensivistas, clínicos, enfermeras instrumentistas, ortopédicos y cirujanos, para reforzar servicios en cualquier sitio que se requiera.

Igualmente partieron hacia Artemisa y la capital, contingentes para contribuir a resarcir daños en el sistema electro energético, las comunicaciones y limpieza y saneamiento de arterias principales.

 

Al desastre habitual que provoca un huracán de gran intensidad en el tendido eléctrico se suma la desconexión del sistema electro energético nacional. (Foto de Ronald Suárez)

 

Como es costumbre los trabajadores de las distintas empresas eléctricas del país se respaldan unos a otros en situaciones de contingencia, esta vez son 126 pinareños los que viajaron en representación del gremio a asumir las labores de restauración.

Mientras que de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S.A (ETECSA), salieron tres brigadas, que llevan como destino el municipio de Bahía Honda, integradas por especialistas en las diversas áreas que abarcan los daños al sector de las comunicaciones.

 

Los trabajadores de ETECSA también han formado al pasar de los años una red de solidaridad para el enfrentamiento a estas contingencias. (Foto de Ana María Sabat)

Trabajadores de empresas forestales vuletabajeras intervendrán en el corte de árboles caídos para despejar vías y facilitar el tránsito vehicular, una de las acciones que incide sobre el resto de las faenas a ejecutar durante el proceso de recuperación.

No importa si portan batas blancas, cascos azules o amarillos, si llevan motosierras, estetoscopios o destornilladores, cada uno de los que ya laboran o están dispuestos a ir van con el mismo empeño, ayudar a Cuba a sanar.

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