Tiene un imperio de libros y literatura, es dueña y señora de un vasto mundo de papel que comparte gustosa con sus niños.
Junto a su buen hacer desde la biblioteca de la Escuela de la Enseñanza Especial Antonio Fernández León, tiene otra pasión que la enamora tanto como los textos: el sindicato, el cual lidera en dicha institución educativa.
A uno y otro se entrega cotidianamente, y en ambos brilla y hace brillar.
Como bibliotecaria les despierta a los infantes que allí estudian, ciegos o de baja visión, el interés por la lectura, y buscan mil y una alternativas para paliar las carencias materiales que impone el bloqueo a un proceso docente educativo tan demandante como el de la enseñanza especial.
También en materia sindical explora nuevos caminos para motivar y activar a su colectivo, que recientemente se alzó con la Orden Lázaro Peña de Segundo Grado.
Por lo mucho que se distingue Yordanka en las misiones que asume, sus compañeros decidieron elegirla como delegada directa al 22 Congreso de la CTC.
Sonriente, como suele ser, y un tanto nerviosa por la noticia, agradece la confianza depositada en ella y dice estar comprometida para representar a quienes día a día contribuyen a la obra de infinito amor que es la educación.