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Cuando alguien dice que el sindicato no funciona

Cuando alguien me dice que el sindicato no existe, que es pura fantasía, que de qué hablo, siempre aludo al Turismo, al Sindicato de este sector, a los dirigentes que conozco, que los he visto representar a sus afiliados desde la inteligencia, el ejemplo, la entrega total, a riesgo, incluso, de ser víctimas de arbitrariedades de no pocos directores, como de hecho, ha sucedido.

Arnaldo Díaz Hiedra, una escuela del sindicalismo en Matanzas. Foto: Noryis

Y eso me produce un hondo orgullo, y fe, la certeza de que la utilidad de la organización está viva, porque respira en la manera en la que los dirigentes sindicales defienden a su gente, pelean por ella, y también en la forma de convocarla, como ahora mismo lo hacen por Guantánamo y sus damnificados por Oscar. En el Turismo, la solidaridad es virtud mayor.

No son palabrerías, son los hechos. Fue en Paradiso-Punta Arena, aquel hotel de Varadero,  donde  se propuso donar parte de las propinas  al hospital de la ciudad de Cárdenas, para paliar el déficit de medicamentos en pleno Período Especial.

“Tenemos que mejorar la representación sindical para que sigan confiando en nosotros”, Estrella Sánchez, secretaria general del buró sindical en el hotel Meliá Las Antillas. Foto: Noryis

Así nació el programa Mi Aporte a la Salud, que donó mucho dinero de trabajadores del sector  a la compra de suero para la  lucha contra el cáncer, y de ahí a extender el brazo solidario por la vida de quienes se han salvado gracias a la sangre de hombres y mujeres de la industria de ocio.

Nos debemos a nuestra gente, asegura Amaurys Echevarría, delegado directo a las sesiones finales del 22 Congreso de la CTC por el hotel Royalton Hicacos. Foto: Noryis

Después vino la Covid-19, Supertanqueros, Huracanes y el siempre el Sindicato de Turismo enseñando su vocación humana, heredera de la esencia de un país que ha convertido la solidaridad en su virtud mayor.

Un día como este 28 de Octubre,  de 1995,  nació el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Hotelería y Turismo (SNTHT). Son 29 años de un parto en medio de una economía que  tocaba fondo. Como entonces, ahora, Cuba necesita de su turismo, necesita que calidad y eficiencia converjan, y también que dondequiera que haya un dirigente sindical, se parezca a los sindicalistas que conozco, y que mucho admiro.

 

 

Entre ellos, escuela y guía, está Arnaldo Díaz Hiedra, secretario general del buró sindical del icónico hotel Sol Palmeras, en Varadero. Él estuvo en la Constitución de SNTHT, que nació y creció bien, lleno de entusiasmo y creatividad, amor de solidaridad, representando a sus afiliados en todas las tareas,  compartiendo lo que tiene con quienes lo han necesitado… siempre presentes en todas las tareas”.

Surgió el 28 de octubre de 1995 , fin de la jornada del Che y Camilo, en  homenaje al Guerrillero Heroico, paladín de la calidad, y al Señor de la Vanguardia, vinculado a la esfera de los servicios

Después de  29 años, Arnaldo se siente orgulloso y más que eso,  satisfecho de ser fundador,  y mantenerme como miembro de su Comité Nacional, representado al colectivo donde trabajo y a todos los trabajadores del turismo. Es un día para recordar a los fundadores y,  muy especialmente, al Comandante en Jefe Fidel,  que planteó y promovió su creación,  para que este sector emergente de la  economía tuviera su representación sindical”.

A pesar de magníficos ejemplos como el de Arnaldo, Julio Enrique Morales Verea, secretario general del SNTHT, considera que de aquí a las tres décadas de la fecha fundacional, “nos toca transfor­mar el funcionamiento orgánico, enseñar la utilidad de estar sin­dicalizados, elegir a los más aptos para los cargos. Tenemos el deber de cambiar. Los trabajadores nos necesitan”.

 

Encabezado por Rafaela Matos, el Buró Provincial del SNTHT en Santiago de Cuba es el de mejores resultados en el país. Foto: Noryis
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