Brigadas de trabajadores de los sectores eléctricos y forestal, así como constructores de Emprestur, aportan ahora mismo a la recuperación de los daños causados por el fenómeno meteorológico en cuatro municipios de Guantánamo.
En cuanto se supo de la magnitud de las afectaciones, como ya es habitual en estos casos, afiliados de Energía y Minas, linieros en lo fundamental; de Agropecuarios, Forestales y Tabacaleros, operarios de motosierras; y del Turismo, albañiles, electricistas, carpinteros, y de otros oficios de la construcción, alistaron sus mochilas de campaña y pusieron manos a las obras de reanimación.
Junto a esos gestos solidarios otros no menos importantes hacen su aparición, entre ellos la donación de sangre, protagonizada por profesores y estudiantes de la Universidad de Oriente.
También la confirmación de valijas con ropa, calzado, aseo, alimentos, juguetes… es ahora mismo misión que se asume en muchos colectivos laborales y que debe aumentar a partir del lunes cuando la mayoría de los trabajadores y alumnos regresen a sus faenas habituales.
Del mismo modo, se hacen donaciones de dinero, por vía de transferencia bancaria, para contribuir a la compra de productos alimenticios con destino a las familias más afectadas en los municipios de San Antonio, Imías, Maisí y Baracoa.
A pesar de las carencias que marcan la cotidianidad de muchos en Cuba, se pone por delante la solidaridad y el amor para que Guantánamo se levante de este golpe de la naturaleza lo más rápido y bien posibles