Centrados en cómo aumentar la producción azucarera del país, enfrentar más resueltamente al delito, resolver el proceso de bancarización en muchas comunidades rurales, así como el papel del sindicato y su asamblea de afiliados para todo eso, es motivo de debate en la sesión final de la III Conferencia Nacional de los trabajadores azucareros, presidida por el integrante del Buró Político y vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa.
En la introducción a la discusión del informe, el secretario del sindicato, Yrrael Rausseau Mansfarrol, llamó a dar luces al pueblo sobre cuánto todavía se puede hacer para detener el decrecimiento de la producción de azúcar como viene ocurriendo en los últimos cinco años. Vladimir Gómez, de la Empresa Uruguay, en Sancti Spíritus, comentó como un central como ese transformó su modelo de gestión económica y el cambio de mentalidad en los trabajadores.
“Hacemos derivados, no hacemos miel ni azúcar, pero nos lanzamos al mundo, a partir de la fuerza calificada, para reparar calderas y otras operaciones de mantenimiento en varios de los centrales aledaños”.
Ponderó el movimiento de ciencia y técnica, y la labor de los innovadores y aniristas, con premios en varios fórums en la provincia y a nivel nacional. “Estamos haciendo énfasis con la vinculación a escuelas tecnológicas y otras del territorio porque eso es el futuro de nuestros trabajadores”, dijo.
Por su parte, Yanisley López Cabrera, de Camagüey, resaltó que el bloqueo económico de los Estados Unidos es el principal factor que incide en nuestro sector.
Asimismo, recordó cuánto apoyó al sector el líder histórico de la Revolución, Fidel Castro Ruz, quien sigue siendo inspiración para los azucareros ante cada dificultad.
A resolver los problemas en la base llamó Denis Martínez Salazar, delegado de la fábrica de calderas en Sagua la Grande, la cual ha trabajado en reparaciones donde parecía imposible una recuperación total para un central.
“Hay que ser perseverante para sacar adelante nuestro sector. La caldera del central Panchito Gómez Toro, sobre la estamos laborando mañana y tarde, debe estar lista en junio 2025”, señaló. Ermiloidy Guerrero Ramírez, abordó con crudeza las cosas que se han hecho en la UBPC Julio Zenón Acosta, perteneciente al central Arquímides Colina, de Granma, para sacarla de la irrentabilidad.
“Por cinco años consecutivos ya tenemos ganancias y sembramos más hectáreas en cada zafra. ¿Cómo vamos a salvar el sector azucarero? Sembrando la caña, pero sembrándola bien. También diversificando las producciones para el disfrute de la comunidad. Solo así podemos salvar el sector”.
No obstante, aprovechó para mostrar su insatisfacción con otros aspectos. “No estoy en contra de la bancarización, pero hay que revisarlo. Tengo trabajadores que están a 32 kilómetros del primer banco y no tienen un teléfono. Por eso se nos van para el sector arrocero. Y nosotros estamos haciendo casas para los trabajadores, pero el pago hay que resolverlo”.
Alexis Hernández Llanes, de Guantánamo, llamó a buscar soluciones estratégicas para salvar también el sector. Lo primero que hay que lograr es una buena dirección en una UBPC, luego un sistema de trabajo de la junta. Puso ejemplos de que solo el 37 % de sus trabajadores tienen teléfonos, por tanto el proceso de bancarización ha creado más problemas que soluciones para pagar el salario, lo cual pidió que sea solucionado lo más pronto posible. Este sector es insignia de Cuba, pero tenemos que salir de aquí convencidos de que hace falta atender al hombre, atender a la familia, y extender las buenas cosas que en muchos lugares se están haciendo.
Recuperar el compromiso con el sector
Ulises Guilarte De Nacimiento, secretario general de la CTC, intervino para recordar que en el ultimo quinquenio se ha ido reduciendo la producción azucarera, lo cual pone al país en extrema complejidad porque ni siquiera logramos cubrir el consumo social. “Este es un sector primario y aportador de riquezas”, dijo. “Por eso debemos recuperar ese compromiso que siempre tuvo este sector con su país, con su pueblo, y con la Revolución”.
Acto seguido, el vicepresidente Salvador Valdés tomó la palabra para comentar sobre el aseguramiento de la próxima zafra, donde molerán 15 centrales en todo el país. Señaló que para ser zafra no solo hace falta centrales, sino combustible. Y a veces esto lacera la producción. Por eso hay que ir a los lugares e intercambiar con los trabajadores, para crear el compromiso necesario.
“Se ha demostrado que hay salida. No se puede perder el horizonte, que es recuperar la caña. Si hacemos eso habrá centrales, más derivados y saldremos de este bache. Desde el 2017 venimos decreciendo en la siembra de caña, pero tenemos que frenar eso ya. Y hay que asegurar también la comida que se necesita para los trabajadores y su familia”, acotó.
Reinaldo Espinosa Collazo, Héroe del Trabajo de la República y administrador de la UBPC Rigoberto Corcho López, de Artemisa, expuso todo lo que vienen haciendo ellos no solo en función de la industria azucarera sino en el aspecto social.
“Hemos reparado más de 30 viviendas y construido 20. Para hacer caña hay que tener buena semilla y no es menos cierto que el tema combustible, pero también es cierto que hay que atender a todo un batey”.
“Cuando era una empresa azucarera, yo me brindé para cortar caña y me negaron el contrato. Tenia 17 años. Mi mamá me parió entre dos guardarrayas de caña. Somos 13 hermanos de mamá y papá. Y fue entonces que me acerqué al sindicato y fuimos para allá y en una brigada millonaria no me aceptaron.“Me mandaron para otra brigada. Yo fui vestido de politécnico. Y en la primera quincena me gané 27 pesos. Al terminar la zafra fui el mejor joven en toda la provincia de Guantánamo. Demostré que si podía. Fui delegado directo al XIII Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes. El batey Costa Rica es un batey azucarero, y es un batey revolucionario”, concluyó con el aplauso más conmovedor de la Conferencia.
Tapia apostó por salvar la industria azucarera
“Es difícil encontrar otro sector que sienta tanto amor por su industria y su tarea como el azucarero. Nosotros tenemos absoluta confianza en ellos”.
Poner en el centro del trabajo sindical los movimientos productivos
Llamó a poner en el centro del trabajo sindical, los movimientos productivos, el sentido de pertenencia que existe en el sector, así como el enfrentamiento al robo de azúcar que tanto daño hace en el contexto actual. Asimismo, exhortó a un mayor liderazgo del dirigente sindical y conocimientos en materia jurídica, económica y laboral.
“Trasladamos una felicitación sincera a solo horas de celebrar su día a todos los trabajadores azucareros, que siempre han acompañado a la Revolución y seguirán haciéndolo desde el central, desde el batey, desde la industria”.