El Sindicato Azucarero, como los de casi todos los sectores, tiene deudas con sus afiliados en temas tan sensibles como la afiliación, la motivación, la atención a sus necesidades más perentorias, los derechos violados por incumplimientos de la Ley 38…, que ponen en la picota pública su vitalidad y la importancia de su existencia.
En la Conferencia Provincial de esta organización obrera en Las Tunas esos asuntos se debatieron en profundidad, y los delegados insistieron en el imperativo de perfeccionar el funcionamiento orgánico, clave para enfrentar con éxitos los desafíos actuales y contribuir con esa fortaleza más al objetivo de salvar el sector agroazucarero del país.
Y, aunque en este propósito no todo depende de los trabajadores, la clase obrera tiene un protagonismo especial, pero necesita de direcciones administrativas y sindicales bien preparadas, con conocimientos y entrega, capaces de dirigir los procesos y conducir a los colectivos laborales por los senderos de la victoria. Ese fue eje temático de los debates.
Al respecto, Yrrael Rouseaux Mansfarroll, secretario general del Sindicato Nacional de los Trabajadores Azucareros, precisó “son tiempos difíciles, pero todas las empresas tienen que discutir su plan y el presupuesto que destinan a la estimulación moral y material de sus trabajadores, y en esa planificación tiene que estar el sindicato defendiendo las partidas”, dijo.
Rouseaux Mansfarroll elogió la labor de muchas empresas agroindustriales azucareras (EAA) del país en la producción de alimentos, devenida forma de elevar la atención al hombre con la venta de viandas, hortalizas, granos, huevos…, pero “nos estamos acostumbrando a no hacer y esa actitud no es tradición en el sector”, sentenció e instó a atemperarse a los tiempos que corren de manera creativa.
En la unidad empresarial de base (UEB) Derivados, adscripta a la EAA Antonio Guiteras en el municipio de Puerto Padre, “tenemos los mismos problemas”, enfatizó Nelsy Polo Gutiérrez, secretaria general del Buró Sindical refiriéndose a las carencias de recursos, insumos, materias primas, impagos de utilidades, bajos salarios y a otros obstáculos que levanta el bloqueo criminal de los Estados Unidos contra Cuba.
Pero, “frente a esos desafíos la administración y el sindicato estamos más unidos que nunca, y esa coincidencia de intereses nos permite realizar sistemáticamente actividades de estimulación a los trabajadores, la esmerada atención a los enfermos y proyectar nuestras acciones hacia la comunidad”, exclamó y reseñó el apoyo brindado al círculo infantil de la comunidad con el arreglo del mobiliario y las donaciones al hogar de ancianos y a la casa de niños sin amparo familiar de la localidad de Delicias, donde está enclavada la UEB.
En Las Tunas hay otros ejemplos que demuestran la posibilidad de hacer más por el bienestar de los colectivos laborales desde la organización sindical, fundamentalmente en la base, por la estimulación oportuna, y la creación de entornos laborales más atractivos y confortables como una medida encaminada a detener la fluctuación de la fuerza técnica especializada que hoy amenaza la supervivencia de esta industria vital para la economía de la nación.
En todos los análisis quedó claro que es imprescindible fortalecer el funcionamiento orgánico y elevar a planos superiores la unidad entre las direcciones administrativa y sindical, pues los mejores resultados están en los colectivos que conjugan esas buenas prácticas.
Los asistentes debatieron cuestiones relacionadas con el pago de utilidades, el empleo del Sistema de Títulos Honoríficos y Condecoraciones de la República de Cuba como vía para la estimulación moral, los reiterados incumplimientos de la Ley 38 que norma la remuneración del trabajo de los innovadores y racionalizadores, la lucha contra el delito, el ahorro y protección de los recursos disponibles, los impagos a los trabajadores, la producción cañero-azucarera y el impacto de la bancarización en lugares donde no están creadas las condiciones necesarias.
En la sesión fue elegido el nuevo Buró Provincial y ratificado Jaime Esquivel Diéguez como su secretario general. También eligieron los delegados a la III Conferencia Nacional por celebrarse los días 11 y 12 de este mes en La Habana.
Presidieron la Conferencia, además, Reynaldo Luis Rivero Álvarez, miembro del Buró Provincial del Partido; Aida Rosa Rodríguez Núñez, coordinadora de Programas y Objetivos del Consejo de Gobierno; y, Odalis Batista Pérez, secretaria general de la CTC.