Por enésima vez triunfó el carácter. Ese fuego que vive en los paratletas cubanos y que en París 2024 dio calor y fuerza a sus conquistas.
Un buen puñado de notas felices dejó la contienda. Por encima del lugar 24 que se alcanzó, gracias al botín de 10 medallas (6, 3 y 1), es necesario resaltar otra vez el papel de la eterna Omara Durand.
Más allá de sus tres coronas, para acuñar su histórica trayectoria con 11 entorchados, la profundidad de su huella la ubica entre los mejores deportistas que ha dado este país.
Suplirla se antoja casi imposible. Ojalá su ejemplo impulse a muchos a superarse y ratificar, que no existen metas imposibles cuando el carácter actúa como motor.
Otros igualmente brillaron. Robiel Yankiel del Sol (salto largo), Guillermo Varona (lanzamiento de la jabalina categoría F46) y Yunier Fernández (paratenis de mesa) coparon lo más alto del podio.
Sin olvidar los premios plateados de Sheyla Hernández (parajudo), Yamel Vives (100 metros planos en la categoría T44) y Pablo Ramírez (en los 54 kilos de las parapesas).
Ulicer Aguilera, bronce (lanzamiento de la jabalina categoría F13), reafirmó el perfil ganador del grupo.
No solo los medallistas se ganaron los aplausos. El resto del grupo firmó notas que invitan al optimismo y merecen una reverencia. Ahí también habita la grandeza.
El próximo ciclo paralímpico ya casi arrancó. Nuevas metas y pronósticos serán lanzados. Algunas figuras ya no estarán, en tanto otras intentarán copar titulares y conquistas.
Tal vez, esta demostración en predios franceses, permita que el proceso de captación de talentos y desarrollo en los atletas con discapacidad, reciba un mayor impulso. Que sus campeonatos nacionales tengan una mejor divulgación y apoyo. Se lo han ganado.
Por cierto, a nivel comunicativo es bueno volver a recordar la necesidad de que los medios impresos acompañen a los paratletas en las principales lides que se avecinan.
Sería un reconocimiento a su sacrificio y determinación. Una gigantesca oportunidad para resaltar a quienes triunfan afincados en su carácter.
La delegación cubana que nos representó en los Juegos Paralímpicos de París 2024 regresará a la Patria este lunes en horas de la noche, tras cumplir una actuación que una vez más ha despertado admiración y cariño en nuestro pueblo, encabezada por la once veces titular en estas citas, Omara Durand.
Junto a ella, todos los campeones y demás integrantes de la delegación, entre ellos, técnicos, personal médico y directivos, recibirán a su llegada el abrazo de las autoridades del país, quienes han seguido desde el primer momento todo el desempeño, cargado de emotividad, consagración y lealtad a la Revolución, tal y como siempre han caracterizado a los deportistas cubanos con discapacidad.
El total de medallas conseguidas: seis títulos, tres platas y una de bronce le dieron un meritorio lugar 24 entre los países participantes, fruto también del movimiento deportivo cubano, aunque lo más importante en este tipo de confrontación deportiva no son los podios, sino el ser humano y los valores formados en una sociedad como la nuestra.
El martes, un día después de su arribo, se les hará una bienvenida oficial en la Ciudad Deportiva (8:00 a. m.), desde donde partirán a un recorrido por varios colectivos de diferentes sectores, los que tendrán la oportunidad, a nombre de todos los cubanos, de tributarle el más sentido afecto y cariño por sus actuaciones.
Entre las instituciones a visitar se encuentran el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (Cigb), la escuela especial Solidaridad con Panamá, la empresa Internacional Cubana de Tabaco (ICT) y la Eide Mártires de Barbados.
Como expresara el Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en varios mensajes en su cuenta de X, esta delegación estremeció a la patria por su ejemplo, talento, gratitud y fidelidad.
Bienvenidos campeones.