La Policía argentina reprimió este miércoles con bastones y gases lacrimógenos a jubilados y pensionados que denunciaban frente al Congreso la intención del presidente Javier Milei de vetar una ley sobre sus haberes.
Según reportó el canal de televisión C5N, varias personas sufrieron heridas, entre ellas una a quien fue necesario vendarle la cabeza.
Tengo 75 años y me reprimieron. A un compañero de más de 80 lo tiraron al suelo. Estamos casi igual que con Videla (Jorge Rafael, militar y dictador), declaró un señor a ese medio de prensa.
No nos alcanza para vivir. Quieren matar a los viejos porque, para ellos, no servimos, pero nosotros hicimos grande a Argentina. Dice Milei que para nosotros no hay plata, pero para los ricos sí. Es un traidor y entrega nuestra nación, afirmó otro ciudadano.
La concentración en los alrededores de la sede legislativa comenzó alrededor de las 15:00, hora local, y los participantes tenían pensado marchar hasta Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada.
“El aumento al que se opone el gobierno es muy pequeño, son 17 mil pesos (alrededor de 17 dólares) que no resuelven los problemas que tenemos. Sin embargo, debemos evitar que sea vetado”, comentó Marcos Wolman, integrante de la Mesa Coordinadora de Organizaciones de Jubilados y Pensionados.
El Gobierno está desfinanciando el sistema previsional. Su plan es privatizar e instaurar un modelo que fracasó en los años 1990, añadió.
Entre las agrupaciones que respaldan la protesta se encuentran el Encuentro de Jubilados y Asambleas Barriales, el Frente Grande, Independientes y la Asociación Trabajadores del Estado.
Recientemente, Milei confirmó que vetará una nueva ley de movilidad jubilatoria, aprobada por el Senado en una sesión que representó un revés para el gobierno.
La norma plantea una actualización mensual de los haberes en base al Índice de Precios al Consumidor (IPC) e incluye una compensación extra de 8,1 por ciento para enero con el objetivo de que las personas puedan equiparar sus ingresos con 20,6 por ciento de inflación de ese mes, en el que el Ejecutivo otorgó solo un 12,5 de aumento.
Asimismo, dispone que la jubilación mínima no debe ser menor al valor de una canasta básica de adulto mayor y que la fórmula no puede quedar atada solo al IPC, sino que tiene que contemplar los salarios. (Tomado de PL)
