Esta nota se redacta en una zona de Santa Clara, (Circuito 193 del Bloque 1), específicamente donde hay unas viviendas con electricidad y otra sin ella debido a “una fase caída” hace varios días y que a pesar de que han acudido a arreglar, no han podido solucionar esta avería local.
Los vecinos afectados están en apagón a pesar de que los déficit de capacidad de generación tienden a disminuir, y que ayer domingo no ocurrió en el horario diurno ni en madrugada, sino solamente en el segmento de mayor demanda que ocurrió a partir de las 5:18 pm con una máxima de 247 MW.
Aunque la molesta interrupción de esta área persiste en unos y no en otros como en la casa de este redactor, el país amaneció sin déficit e inclinación hacia la mejoría con la esperada incorporación en el horario pico de las unidades térmicas 1 de Santa Cruz del Norte y 3 de Renté.
Según el ingeniero Lázaro Guerra Hernández, director de Electricidad del Ministerio de Energía y Minas, en las actuales condiciones, el Despacho Nacional de Carga estima que la afectación hoy solo ocurrirá en el pico nocturno con 373 MW, inferior con los alrededor de 1000 MW que ocurrieron antes.
La disponibilidad estimada hoy es de 2647 MW, insuficientes para enfrentar la demanda calculada en 2950, ligeramente superior a la de días precedentes debido a que pasaron los efectos de las lluvias y la temperatura y sensación térmica aumentan, causando mayor uso en los equipos de refrigeración y climatización.
Con solo cinco paneles solares de 21,8 MW se generan 120 MW, lo cual equivale a la mitad de una termoeléctrica como la Antonio Guiteras, por lo cual se ejecuta aceleradamente el programa de instalación de capacidades para lograr 1000 MW a mediados del próximo año.
A partir de esta noche, solo quedaría una unidad térmica averiada, la 2 de Santa Cruz del Norte, donde se trabaja intensamente para reintegrarla al sistema electroenergético, pues como las restantes, usa petróleo nacional.
Se recomienda a mis vecinos estar informados por los canales oficiales y continuar adoptando medidas de contingencia para cocinar y preservar los alimentos que necesitan refrigeración, pues cuando retornen a realizar las reparaciones, cortarán completamente la electricidad y al restablecerse, podría ocurrir el correspondiente por déficit de capacidad de generación.
La proverbial solidaridad cubana y la resistencia creativa siguen haciendo gala de su existencia en esta área como en todas, pues un apagón por déficit puede prolongarse seguidamente por otro debido a roturas.