Las bombas silenciosas cuyo objetivo es la economía impiden que por estos días se inauguren obras como se hacía en otros tiempos previo a fechas históricas: la textilera Desembarco del Granma, INPUD Primero de Mayo, Planta Mecánica Fabrica Aguilar Noriega, Saklenaf Luis Augusto Turcios Lima, la fábrica de bicicletas Heriberto Mederos, la fábrica de Bujías Neftalí Martínez entre otras.
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A esas y otras obras de la Revolución le truncaron el auge el bloqueo económico, comercial y financiero que ha ido arreciando un año tras otro, pero permanecen como infraestructura industrial de Villa Clara, donde también hay servicios creados o ampliados por los trabajadores a partir de 1959.
Los afiliados del movimiento sindical villaclareño no se paralizan bajo el bombardeo, sino que viven, crean, resisten y continúan su obra como es el caso del acondicionamiento de la Sala B de Medicina General del hospital universitario clínico quirúrgico Arnaldo Milián Castro.
Hospitales como ese también fueron levantados por los trabajadores de la cosntrucción en Sancti Spíritus y Cienfuegos que formaban parte del territorio de Las Villas, cuyo hospital provincial era el Celestino Hernández ubicado en Santa Clara, de mucho menor capacidad que cualquiea de los nuevos.
Osnay Miguel Colina Rodríguez, primer secretario del Partido en Villa Clara, y su gobernadora Milaxys Sánchez Armas, comenzaron por esa instalación de la salud un recorrido donde se aprecia la resistencia de los trabajadores para mantener sus conquistas.
Ese centro como el espirituano Camilo Cienfuegos o el cienfuguero Gustavo Aldereguía multiplica el número de camas y equipamientos de otrora hospital provincial de Las Villas, y también fue objeto de atención de los trabajadores que prepararon el Laboratorio de Anatomía Patológica dotado de un novedoso equipo, único de su tipo en la región central, que permite contar con un diagnóstico más certero y tratamiento específico para cada dolencia.
También se concluyeron labores constructivas en las salas de Medicina B, Neurología y la unidad de Ictus, servicio que para la atención al paciente grave, y están en marcha otros procesos inversionistas.
Por cierto, las obras en homenaje de los trabajadores villaclareños al aniversario 71 del asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes también abarcaron lo que fue el antiguo hospital provincial de Las Villas, el Celestino Hernández, donde fuerzas constructoras acondicionaron la instalación donde funciona un equipo de radioterapia para prestar servicio a pacientes de todo el país.
También los constructores ejecutaron reparaciones de las secciones de Cuerpo de Guardia y Rayos X.
Inspirados en la epopeya de la Generación del Centenario, los trabajadores villaclareños hacen lucir como nueva, la unidad El Campesinos que beneficia a 120 asistenciados del Sistema de Atención a las Familias y está ubicado cerca de las áreas donde se concentran los hospitales de Santa Clara.
La efemérides también recibe el homenaje de los afiliados del Sindicato Nacional de Trabajadores Agropecuarios, Forestales y Tabacaleros que en la zona santaclareña de Antón Díaz operarán el primer Centro de Valoración Energética de la Biomasa Forestal de Villa Clara.
Esa instalación de la UEB Producciones de Carpintería MADECA, perteneciente a la Empresa Agroforestal, en su primera fase, permitirá producir electricidad en los centrales azucareros de la provincia, y aportar al sistema electroenergético nacional, a partir del uso de los desechos de madera generados por el sector, luego de su procesamiento.
Maglin del Sol Martínez secretaria general de la CTC en Villa Clara declaró que todos los afiliados merecen una felicitación en el Día de la Rebeldía Nacional, pero en especial dedica un reconocimiento a los que trabajaron en la obras para rendir homenaje al 26 de Julio
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