El 335 aniversario de la ciudad de Santa Clara, capital de Villa Clara, es conmemorado con un festejo de resultados productivos protagonizado por los trabajadores que entre otros objetivos, concluyeron obras de ampliación y mejores en la prestación de servicios.
Aunque las actividades culturales y recreativas son las más visibles este 15 de julio, día en que fue fundada en 1689, los santaclareños no pierden de vista obras que benefician a las comunidades y no solo por la pintura de sus fachadas.
Colectivos laborales emprendieron la edificación como los dedicados a la venta de gas licuado de petróleo que han sido reiteradamente demandas por los electores en las barriadas de Antón Díaz, Universidad, Chamberí y Sakenaf.
Al no existir esos puntos de venta, había que desplazarse a largas distancias y comprar en una instalación sin suficientes condiciones ni capacidad para asimilar la excesiva cantidad de clientes que padecían largas horas de espera.
Los trabajadores de Santa Clara también repararon el comedor del Sistema de Atención a la Familia El Campesino, en el consejo popular Hospital-Chamberí, así como construyeron otros dos en Sakenaf y Los Sirios, y una oficina de correos en Caracatey.
El programa constructivo no tuvo la envergadura de acciones de mantenimiento y conservación de años de holgura económica, pero en medio de las limitaciones han logrado mejoras y acercamiento de servicios, lo cual es agradecido en las comunidades.
“Santa Clara en mi corazón” es la consigna con la cual en los últimos meses aceleraron la ejecución de las obras, pero en estos 335 años ha estado siempre presente el esfuerzo del movimiento sindical para dotar a esta urbe de importantes industrias.
Aunque se continuará trabajando para abrir otra sucursal de la Empresa Eléctrica en el centro de Santa Clarta, ya hay nuevas en las zonas de Abel Santamaría, Caracatey, Paseo de la Paz y José Martí.
También funciona nueva farmacia en Picadora y se está construyendo otra en el Reparto Escambray donde la existente está en un apartamento de edificio multifamiliar, y recibe clientes de una amplia zona, de hasta casi 10 kilómetros de distancia.
A propósito del aniversario 335 de Santa Clara, también inauguraron dos casitas infantiles para las entidades de Comercio y la Empresa del Yabú, así como se construyen otras dos para la Cosntrucción y Electromecánica.
Otras labores de los trabajadores santaclareños ha sido la reparación de hogares maternos y de ancianos, casas de abuelos y más de 20 consultorios del médico de la familia, así como la construcción de uno en la comunidad de Oropesa.
El programa no se detiene, pues de ahora en adelante continúan en la conservación y pintura de sus seis policlínicos y luego beneficiarán el hogar de ancianos No. 1.
Para emprender estas tareas, han sido convocados los trabajadores de todos actores económicos que incluyen 84 empresas, más de 220 mipymes, más de 25 000 trabajadores por cuenta propia, 48 unidades presupuestadas, 27 formas productivas de la agricultura, el movimiento de artistas y creadores del Fondo Cubano de Bienes Culturales, las organizaciones políticas y de masas, los delegados de circunscripción y sus grupos de trabajo comunitario.
Felicidades a los santaclareños en el 335 aniversario de esa ciudad, tan querida y entrañable para mí. pic.twitter.com/y8anOyUVA5
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) July 15, 2024