Con el ritmo, color y alegría característica del Caribe se inició este miércoles en Santiago de Cuba la 43 edición de la Fiesta del Fuego, extendida hasta el 9 de julio.
La gala inaugural en el teatro Heredia fue reflejo de lo más auténtico de las expresiones de la cultura popular de esta zona del mundo, con énfasis en las de Salvador de Bahía, Brasil, estado al que se le dedica el Festival del Caribe en esta ocasión.
Orlando Verges, director de la Casa del Caribe, rememoró la dedicatoria al país latinoamericano en los años 1997 y 2010, antecedentes que permitieron estrechar los lazos culturales entre ambas naciones.
Destacó entre los rasgos comunes de la Ciudad Héroe y el estado homenajeado el gran mestizaje dada la temprana concentración de esclavos africanos, de ahí la riqueza en variantes de religiosidad popular.
Agradeció el apoyo del Ministerio de Cultura y de las autoridades del país y de la provincia, por el respaldo brindado para la realización del evento, lo cual también es fruto de las opiniones y deseo expresados por el pueblo santiaguero.
Christian Vargas, embajador de Brasil, señaló que el Caribe para su país es un espacio de cooperación, solidaridad e identidad, dimensión presente siempre en este evento.
Manifestó la alegría y el compromiso que representa la dedicatoria, con el objetivo de continuar fortaleciendo los lazos existentes entre ambas naciones.
Momento especial fue la entrega del Premio Internacional Casa del Caribe a José Angel García Vázquez, director del grupo JJ Son, por su contribución a la cultura local, nacional, a la institución y a su festival, así como de un reconocimiento al septeto Moneda Nacional, agrupación defensora del son.
Asistieron a la cita Beatriz Johnson, primera secretaria del Partido Comunista de Cuba en la provincia, Manuel Falcón, gobernador, y otros directivos de cultura en el territorio suroriental.
La Fiesta del Fuego se consolida como plaza para la celebración y el gozo, cualidades naturales de los pueblos que conforman la región del Caribe.
