El 21 de mayo de 1974 nació la otrora Agencia de Información Nacional (AIN) con su primer despacho noticioso y surgida por Resolución del Secretariado del Comité Central del Partido, que acordaba “la creación de un órgano informativo de carácter nacional cuya misión fundamental consistirá en promover, activar y sistematizar la divulgación entre las masas a través de los órganos de prensa, de las realizaciones de la Revolución y la actividad socioeconómica, política, científica y cultural que se realiza en todo el país”.
También tenía otras funciones como la tramitación de informaciones, documentos, notas, comunicados de carácter oficial y la organización de la cobertura periodística centralizada para las actividades del Partido y del Gobierno.
Se consideró entonces la necesidad de contar con un flujo informativo del acontecer del país, por lo general desde La Habana hacia las provincias y, a su vez, lo que en estas ocurriera transmitirlo a los medios nacionales, rememora la Doctora en Ciencias de la Comunicación Edda Diz Garcés, directora general de la ACN.
Así comenzó el bregar periodístico desde la redacción central en La Rampa capitalina hacia las primeras corresponsalías creadas de manera experimental en Pinar del Río, y luego en Camagüey hasta completar los restantes territorios según la División Política Administrativa vigente e incluir al Municipio Especial Isla de la Juventud. Posteriormente, con el advenimiento de nuevas provincias, se establecieron las oficinas de la AIN en cada una de ellas.
Camino hacia lo actual
La acogida de la digitalización dejó atrás al inconfundible teclear de las máquinas de escribir y de los voluminosos teletipos o télex para dar paso a las computadoras y otros medios.
“Evolucionaron las tecnologías y también nuestra gente”, plantea Diz Garcés cuando comenta la llegada de Internet y del sitio web, uno de los primeros del país.
Sin perder la esencia de su objeto social y dada la necesidad de acercar más el contenido de su alcance y funciones, la AIN adoptó el nombre de Agencia Cubana de Noticias en el año 2015.
Importantes momentos en diferentes etapas han sido la salida al aire del Canal Señal ACN, 2006, dirigido a los cooperantes cubanos en Venezuela y otros países latinoamericanos y
caribeños; Premios a la Innovación Periodística en el 2021 y el Juan Antonio Borrego en el 2023, y reconocimientos otorgados por la Central de Trabajadores de Cuba y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Cultura.
Según valoración de la Unión de Periodistas de Cuba (Upec), la ACN integra el grupo de avanzada en la aplicación del experimento para la transformación de su gestión editorial, tecnológica y económica, en el cual están inmersos 17 medios de prensa cubanos.
Tal experiencia muestra resultados en la calidad e inmediatez de nuestros contenidos, la ampliación del objeto social y la cartera de productos y servicios, el incremento de los ingresos para la innovación y el desarrollo, el avance integral del medio y la estimulación salarial a los trabajadores con énfasis en los que más aportan, puntualiza Diz Garcés.
Adianez Ojeda Lago, subdirectora de publicaciones, investigación y marketing, explicó que la gama de servicios incluye asistencia a instituciones en materia de comunicación asociada a la creación de documentos que soliciten, investigaciones especializadas, espacios promocionales en la revista Ofertas digital e impresa, banners publicitarios, entre otras funciones.
Jóvenes recién graduados de Periodismo como Aylín Herrera Reyes ponen lozanía al día a día de la Agencia a la que llegó en enero del año 2022. “Para mí es un regalo trabajar aquí”, señala la novel reportera seleccionada entre los cinco acreedores del Premio a la Obra del Año 2023, otorgado por su colectivo.
En el centro del combate cotidiano frente a las mentiras y manipulaciones y fake news que forman parte de la guerra mediática contra Cuba, la ACN también está presente al “ofrecerle al pueblo la materia prima informativa que tenemos en las manos con inmediatez y decir las cosas como son, con sus matices y colores”, subraya Edda.
“Tratamos —enfatizó— de ser un reflejo del país en que vivimos, de su gente, sus logros y dificultades, dar los argumentos de esa realidad y hacerlo con la mayor integralidad y calidad posible. Para eso nos preparamos, informamos y trabajamos en colectivo”.