La tan esperada 15ª cumbre de la Organización de Cooperación Islámica (OCI) concluyó el domingo en Banjul con los líderes de sus estados miembros adoptando una posición firme sobre la cuestión palestina. También delinearon los principios rectores y el enfoque de las cuestiones políticas, humanitarias, jurídicas y de las económicas que afectan a la organización de 57 miembros.
Bajo los auspicios del nuevo presidente Adama Barrow, mandatario de Gambia, la Cumbre de Banjul confirmó la posición de principios de la OCI en apoyo del pueblo palestino y su causa, exigió el cese inmediato de la agresión israelí contra la Franja de Gaza, así como la facilitación de medidas sostenibles para la entrega de ayuda a la Franja.
Además, acordaron continuar las acciones desde el mundo islámico para apoyar el derecho de Palestina a obtener membresía plena en las Naciones Unidas, lo que conducirá a la encarnación del Estado de Palestina, con Al-Quds Al-Sharif (Jerusalén Oriental) como su capital.
Según Hissein Brahim Taha, secretario general de la OCI, la Cumbre de Banjul ratificó su apoyo a la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) y confirmó el papel vital que desempeña en una zona que lleva más de siete decenios de conflicto.
Los participantes acordaron además emprender acciones legales para procesar a Israel ante la Corte Internacional de Justicia y la Corte Penal Internacional, así como para exigirle responsabilidades por sus atroces crímenes contra el pueblo palestino.
La Cumbre de Banjul prestó especial atención a los derechos de las mujeres, los niños, las personas con necesidades especiales y los jóvenes, a la urgencia de mejorar la cooperación económica, los intercambios comerciales y la agricultura para apoyar la seguridad alimentaria y proteger el medio ambiente, así como a la importancia de enfrentar la islamofobia y los conflictos de origen religioso, fenómeno que merece ser contrarrestado con mayor cooperación internacional, dijo Taha.
El Secretario General de la OCI señaló que las resoluciones adoptadas por la Cumbre fortalecieron la solidaridad y la unidad que unen a los Estados miembros.
En nombre de la OCI el señor Taha agradeció al presidente Adama Barrow, a su Gobierno y al pueblo de Gambia por la cálida bienvenida, la generosa hospitalidad y la excelente organización de las sesiones en La Costa Sonriente de África.
El líder expresó su gratitud a Gambia por los esfuerzos invertidos para garantizar la organización exitosa y el buen funcionamiento del 15.º período de sesiones, que, según dijo, contribuye enormemente al éxito de la OCI en general.
El secretario general Taha elogió la atmósfera de cooperación y entendimiento que predominó en Banjul, lo cual condujo a resultados consensuados, posiciones unificadas y solidaridad entre los Estados miembros.
Anteriormente el presidente Adama Barrow, en sus palabras de clausura, afirmó la determinación y el compromiso de Gambia con los principios, programas y deseos de los Estados miembros de la OCI. Reiteró que está decidido a dedicar su presidencia al logro de los objetivos establecidos en la Cumbre y en la declaración de Banjul.
La reunión de la OCI atrajo a delegados de los 57 Estados miembros, incluidos varios mandatarios.
* Lamin Chan es periodista gambiano.