El Congreso del Cincuentenario sobre el Nuevo Orden Económico Internacional, celebrado del 28 de abril al 1 de mayo en el Capitolio Nacional de La Habana, Cuba, se clausuró ayer, miércoles 1 de mayo, con una «hoja de ruta para una insurgencia del Sur Global que rehaga el sistema mundial mediante instituciones nuevas y alternativas de gobernanza global para la paz, la prosperidad y la protección planetaria».
El Congreso —convocado por la Internacional Progresista y la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba— reunió en esta capital a destacados académicos, diplomáticos y legisladores de 36 países, entre ellos Brasil, Sudáfrica, China, Colombia, Kenia, Indonesia y España, durante tres días de intensos debates, deliberaciones y preparación de un Programa de Acción para garantizar la paz mediante el desarrollo soberano en el siglo XXI.
Entre los participantes se encontraban Ernesto Samper, Ex Presidente de Colombia; Attiya Waris, Experta Independiente de la ONU sobre deuda externa, otras obligaciones financieras internacionales y derechos humanos; Mathu Joyini, Representante Permanente de Sudáfrica ante la ONU; Cristina Reis, Subsecretaria brasileña de Desarrollo Económico Sostenible; Ramón Pichs-Madruga, Vicepresidente del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático; Andrés Arauz, Ex Gobernador del Banco Central de Ecuador; Marlon Ochoa, Ministro de Finanzas de Honduras; y Jeffrey Sachs, Director del Columbia Center for Sustainable Development.
Los delegados reunidos debatieron estrategias y tácticas para conseguir un Nuevo Orden Económico Internacional y trabajaron sobre importantes propuestas de reforma estructural en torno a cinco temas:
- Finanzas, Deuda y Sistema Monetario Internacional
- Ciencia, Tecnología e Innovación
- Clima, Energía y Recursos Naturales
- Productos Básicos, Industria y Comercio Internacional
- Gobernanza, Multilateralismo y Derecho Internacional.
Estas propuestas se desarrollarán en un Programa de Acción renovado y detallado para el establecimiento de un nuevo orden económico internacional antes de la Asamblea General de las Naciones Unidas de septiembre de 2024, junto con gobiernos asociados de todo el mundo. Este desarrollo programático, que será supervisado por un comité técnico de la Internacional Progresista, se llevará a cabo a través de foros en línea y en posteriores conferencias presenciales, con Argelia, Honduras, México y Colombia como países anfitriones.
El Congreso de La Habana concluyó con una presentación del Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez en la que expuso la visión de la Presidencia cubana del Grupo de los 77 + China para el Nuevo Orden Económico Internacional.
En su presentación de apertura del Congreso, la Representante Permanente de Sudáfrica ante la ONU, la Embajadora Mathu Joyini, afirmó:
«El Nuevo Orden Económico Internacional abordará los perjuicios causados a los países en desarrollo por el sistema internacional, incluida la serie de abusos financieros, comerciales y fiscales que han estado succionando billones del Sur».
En sus observaciones finales, el ex ministro cubano de Economía y Planificación, José Luis Rodríguez, afirmó:
«Lo primero para lograr el desarrollo es la paz. Mientras sigan cayendo bombas, no lograremos el desarrollo».
Para clausurar oficialmente el Congreso, la Co-coordinadora General de la Internacional Progresista, Varsha Gandikota-Nellutla, declaró:
«En este Congreso histórico, celebrado en el esplendor del Capitolio Nacional aquí en La Habana, los académicos, diplomáticos y legisladores de Senegal a Suecia, de Colombia a China, de Australia a Argentina han trazado un camino concreto e inspirador para salir de esta era de saqueo y venganza intolerables.
Tenemos ante nosotros una hoja de ruta para que una insurgencia del Sur Global rehaga el sistema mundial mediante instituciones nuevas y alternativas de gobernanza global para la paz, la prosperidad y la protección planetaria.
En septiembre, en la Asamblea General de las Naciones Unidas, publicaremos este plan de acción detallado y nos comprometeremos a trabajar sin descanso para unir, movilizar y organizar a las fuerzas progresistas de todo el mundo para conseguirlo.»