La rendición de cuentas de la labor de las Fuerzas Armadas Revolucionarias a los trabajadores es un ejercicio que adquiere una especial dimensión como nunca antes, toda vez que su industria militar, uniones empresariales en las esferas agropecuarias, de la construcción e industrial tienen una incidencia directa en el apoyo a la economía nacional en los momentos actuales que vive el país.
Una muestra elocuente de la efectiva contribución de ese organismo fue tema abordado este jueves durante el 115 Pleno del Consejo Nacional de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) presidido por Ulises Guilarte de Nacimiento, su secretario general y miembro del Buró Político del Partido Comunista y por el Viceministro de las FAR, General de Cuerpo de Ejército Joaquín Quintas Solá.
El General de Brigada Marcelo Pérez Pérez, segundo jefe de la Dirección Política de las FAR, presentó el informe de la labor realizada en la preparación para la defensa en el 2023, etapa en la que sobresalió la cooperación con el Ministerio de la Agricultura en el cumplimiento de la política del uso, tenencia y distribución de tierras, la contratación y pago a los productores, actividad que se realiza con el objetivo de incrementar la producción de alimentos para la población, rejuvenecer la fuerza laboral en los campos, entre otros fines.
Destacó, asimismo, el apoyo a la campaña antivectorial, la sostenibilidad del Sistema Eléctrico Nacional en las termoeléctricas, emplazamientos de generación distribuida y el mantenimiento a grupos electrógenos de conjunto con especialistas de la Unión Eléctrica, la restauración de los daños ocasionados por el huracán Ian en la provincia de Pinar del Rio y la participación de los módulos agropecuarios en el cultivo de hortalizas, viandas y frutales,
Otras actividades estuvieron relacionadas con obras ferroviarias, reparación y puesta en marcha de máquinas herramientas, el restablecimiento de la fábrica de cemento en la provincia de Cienfuegos, restauración y modernización de medios informáticos, sistemas de comunicación e instalación de cables de fibra óptica para la Empresa Etecsa.
La Unión de Industrias Militares trabaja en el restablecimiento de la producción en la fábrica de cemento en la provincia de Cienfuegos con importantes acciones en algunos de sus equipos tecnológicos.
Durante la etapa las FAR junto al pueblo continúa incrementando la preparación del personal con el objetivo de mantener niveles de disposición y capacidad defensiva alcanzados y estar preparados ante cualquier agresión del enemigo.
Al valorar el informe, Guilarte de Nacimiento ponderó, entre otros muchos ejemplos, el amplio espectro de actividades realizadas por los combatientes de las FAR y sus unidades en diferentes sectores e industrias del país en apoyo a la economía sin descuidar su esencia en asegurar la preservación de la defensa de nuestra patria.
Propuso llevar a cabo, desde el movimiento sindical, el seguimiento particular a los jóvenes desmovilizados del Servicio Militar, una valiosa fuerza que debemos atender cuando se incorporan a los colectivos laborales para asegurar su continuidad formativa mediante cursos se les puedan ofertar.
El General de Cuerpo de Ejército y viceministro de las FAR, Joaquín Quintas Solá, agradeció a la dirección del movimiento sindical y a los participantes en la reunión la atención e importancia concedida al informe presentado.
Se refirió a la participación del Ejército Juvenil del Trabajo y de otras unidades en la producción de alimentos para la población sin abandonar el sagrado deber de la defensa de la Revolución y la preparación militar para la Guerra de todo el pueblo, concepto expresado por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz y el General de Ejército Raúl Castro Ruz.
Producir los alimentos que necesitamos
Al intervenir en el Pleno, José Ramón Monteagudo Ruiz, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido y jefe de su departamento agroalimentario, llamó a impregnar en todo los cuadros sindicales el ejemplo de los combatientes de las FAR en la realización y de las tareas asociadas a la producción de alimentos y asumir el reto como nos indicó el VIII Congreso del Partido.
No se trata –subrayó- de cumplir un plan porque todos sabemos que están por debajo de las necesidades de la población; se trata de asumir la producción de alimentos que necesitamos, en correspondencia con los momentos que vivimos, los recursos que disponemos, utilizando las potencialidades que tenemos en los territorios y con la menor dependencia del exterior.
Comentó que se ha detectado descontrol en el uso y explotación de la tierra entregada, falta de seguimiento y debilidades en quienes tienen esa responsabilidad directa y en el cumplimiento de funciones estatales y empresariales.
Al respecto instó a darle atención diferenciada a estos problemas desde las estructuras sindicales, enfrentar lo que está ocurriendo y evitar nuevas ilegalidades y generalizar las mejores experiencias en materia de planificación, organización, disciplina y comercialización de los productos para lograr resultados superiores.
Monteagudo Ruíz precisó que se ha solicitado tierras, pero todavía no por parte de todos los organismos que pueden hacerlo y las entregadas aun no se explotan adecuadamente.