El sistema eléctrico nacional tiende a la mejoría con la reactivación de los emplazamientos de motores fuel oil de Mariel y Moa, las unidades flotantes (patanas) ubicadas en Mariel, La Habana y Santiago de Cuba, así como los equipos de generación distribuida que están recibiendo diésel.
Este respaldo a la generación base, que es la térmica, permite continuar el retiro controlado de termoeléctricas para labores preventivas que mantengan su funcionamiento estable durante julio y agosto, que son los meses de mayor demanda.
Además de la reactivación a plantas paralizadas o limitadas por combustible, en las próximas semanas se reintegrarán las unidades de Mariel y Nuevitas que han recibido labores de mayor profundidad que demandaron más tiempo de trabajo.
La generación de electricidad se presenta favorable para que, sin consecuencias negativas, en los meses finales del año pueda salir la Antonio Guiteras para un prolongado aplazamiento de mantenimiento capital requerido desde hace mucho años.
Esa termoeléctrica matancera ha llegado a rebasar el plan de generación, una contribución apreciable que contribuyó a que las afectaciones no hubieran sido superiores.
Aunque se ha reiterado, continúa siendo necesario aclarar que los apagones pueden ocurrir aunque no haya déficit de capacidad de generación, pues las interrupciones pueden ocurrir por averías locales en redes, postes o transformadores.