Hacerse el de oídos sordos ante la relación gastos-ingresos es nocivo para la columna económica de cualquier entidad, máxime si, de no cuadrar la lista con el billete, salta una desproporción en los números de las cuentas, que la lleva irremisiblemente al precipicio de las pérdidas, con el consiguiente daño en el salario de los trabajadores y el incumplimiento de su encargo social.
En el Municipio Especial Isla de la Juventud, de 34 empresas al cierre del año 2023, dos cerraron con pérdidas. Pero lo más preocupante es que al iniciar el actual año otras entidades se sumaron a la lista.
Cascabel sin gato
Danay María Mingorance Oliva, directora de Economía y Planificación del territorio, explica la situación.
Al cierre del 2023 con números negativos estuvieron las empresas de Farmacia y Ópticas y la de Transporte Automotor. En el primer mes del 2024 se sumaron otras. Materiales de la Construcción culminó con utilidades el año pasado y en enero registró pérdidas. Los indicadores productivos no llegaron a lo esperado por el déficit de combustible, cemento y el deterioro de los equipos tecnológicos.
¿Y lo subjetivo? Ha faltado encadenar sus fabricaciones con los nuevos actores económicos, buscar alternativas con los recursos endógenos, sobre todo abrir mentalidades hacia otras maneras de hacer, gestionar más tanto dentro como fuera del territorio, con sus homólogos para resolver problemáticas similares ya solucionadas.
Correos de Cuba culminó enero con un estado contable en negativo, debido a la disminución de la prestación de servicios, como son los giros postales, que ahora se hacen en gran medida por Transfermóvil, la comercialización de sellos de cinco pesos de forma digital, la disminución de la paquetería nacional e internacional y la falta de carteros.
Servicios Portuarios Manuel Porto Dapena concluyó diciembre con utilidades e iniciaron el año con resultados negativos, debido en lo fundamental a la disminución de la entrada de mercancías al municipio, lo que les impidió cumplir con la carga general.
En cuanto a la ya mencionada de Farmacia y Ópticas, lleva tres años operando con números negativos, al punto de planificar pérdidas. Influyeron en este resultado el déficit de medicamentos, los cuales se encuentran al 24 % de abastecimiento, de 63 renglones. En las ópticas se registran falta de armaduras, cristales con graduaciones y materias primas para la producción.
Urge que analicen la pertinencia del encadenamiento con otros actores económicos y la búsqueda de variantes para devolver la vitalidad a esta entidad.
Comercio y Gastronomía es una empresa de la cual se desconoce su cierre contable del 2023: no informó su estado financiero a la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (Onei), e igual proceder sucedió en enero, pero al informarlo a la Dirección de Finanzas y Precios del Territorio, se constató que culminó con pérdidas e incumplió sus ventas.
Alegaron disminución de los productos de la canasta familiar normada, al igual que de consumidores, según datos de la oficoda; la entrega gratuita de productos mediante donaciones, carencia de partes y piezas de repuesto para la reparación de equipos electrodomésticos, la escasez de ofertas gastronómicas e incumplimiento de los servicios de alojamiento.
Transporte Automotor, que cerró el 2023 con pérdidas, no ha mejorado en el actual año, pues ha dejado de ingresar 708 mil 160 pesos por la no correspondencia entre las tarifas actuales aplicadas y las fichas de costos; es decir, se cobra menos que lo que cuesta dar el servicio.
Otra de las agravantes del incumplimiento es por la inejecución de gastos en aceite, grasas, lubricantes y servicios de mantenimientos corrientes. En su lugar ingresaron por actividades secundarias: arrendamiento de equipos, locales, espacios y parqueos.
En la punta del iceberg
Todas las entidades mencionadas tienen incidencia en la prestación de los servicios al pueblo, pero sobresalen dos por la repercusión en disímiles aristas sociales: Materiales de la Construcción, la cual se trazó medidas para revertir esta situación y desatar sus fuerzas productivas; y Transporte Automotor, que si empleara como herramienta de trabajo encadenarse con otros actores económicos, garantizaría mayor transportación de pasajeros ante la compleja realidad económica del país.
“Esta situación es desfavorable porque los resultados negativos traen aparejado el incumplimiento de indicadores económicos y planes productivos y de servicios, de las ventas y, por consiguiente, afectación al pueblo”, alegó la directora de Economía y Planificación del territorio.
“De no revertirse seguiremos siendo insostenibles y lacerando la economía al no cambiar los métodos que permitan mayor vínculo e interacción comercial y productiva, encadenamientos o la creación de más empresas filiales”, precisa.
“Las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) estatales, permiten reorganizar el sistema empresarial, y lograr mayor articulación entre las empresas que lo componen para diversificar las producciones y ampliar el objeto social.
“Si bien son palpables las limitaciones de materias primas e insumos, es una necesidad redoblar los esfuerzos a partir de gastar menos y producir con mayor utilización de recursos locales e inserción de la ciencia e innovación”, concluye.
¿Y el papel del sindicato?
Nelkys Lopetegui Castillo, miembro del Secretariado de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) en el territorio, y al frente de la Esfera de Asuntos Económicos, expresó que al análisis del tema se destina un punto permanente en la reunión del Secretariado, realizada el segundo martes de cada mes, además de darle seguimiento, a través de los despachos con el Consejo de Administración Municipal.
“En estos espacios profundizamos en las causas y condiciones para revertir ese panorama desfavorable y en su lugar reportar eficiencia en el desempeño. Además, participamos en los consejos de dirección y asambleas de afiliados de estas entidades con pérdidas en sus estados financieros, e insistimos en la labor proactiva que deben desempeñar nuestras organizaciones de base con el fin de comprometer a la masa de trabajadores para que, a pesar de los pocos recursos existentes, se busquen alternativas en aras de garantizar el cumplimiento del plan técnico-económico”.
Un final que no puede ser abierto
Ante un contexto de escasez que provoca la nula rentabilidad se impone encontrar fórmulas viables para avanzar, y el movimiento sindical tiene en sus manos un instrumento para potenciar esa búsqueda de eficiencia: las asambleas de discusión y análisis del plan y el presupuesto, en los que la administración debe aportar críticamente los datos productivos, y el sindicato promover la participación activa de los trabajadores en la solución de los problemas.
Resolver las pérdidas y alcanzar la eficiencia constituye, en las circunstancias actuales, un desafío si se quiere romper la inercia y mejorar la gestión y con ello beneficiar a los propios trabajadores y a la población. Solo así la lista podría coincidir con el billete.