Aunque viene bien el dicho de que cuando no es Juana es su hermana, le falta la coletilla de que sea una u otra, quienes enfrentan las dificultades son los mismos trabajadores de siempre que han logrado cambiar las condiciones del sistema eléctrico nacional.
Las transformaciones provocaron la obsolescencia del chiste de que una buena noticia era que se acabarían los apagones del 2202 y que la mala era que empezarían los del 2023, año que transcurrió en mejor situación.
Y también el comportamiento de las termoeléctricas en 2023 se ha mantenido en el actual 2024, pues reafirman su posición de base del suministro al faltar el combustible en los subsistemas de generación distribuida, la flotante y los emplazamientos de motores.
No ocurrió el pasado año ni en el presente como en aquellos meses en que lo mismo Juana que su hermana hacían que al reparar una termoeléctrica se rompieran varias, pues ahora salen controladamente para mantenimientos encaminados a que el subsistema térmico continúe como hasta hoy o mejor.
Se encuentra en mantenimiento la unidad 8 de Mariel y la 6 de la CTE Nuevitas.
Como hacía el doctor Francisco Durán durante el enfrentamiento a la Covidd-19, el ingeniero Lázaro Guerra Hernández, director técnico de la Unión Eléctrica comparece diariamente para explicar la situación de los déficits de capacidad de generación en su contexto.
Desde posiciones pesimistas parecía que Cuba no sucumbiría ante las dificultades del bloqueo, pero sí de la pandemia, mientras llenos de confianza revolucionaria en sus propias fuerzas, científicos y personal de la salud conjuraron la amenaza de la enfermedad pulmonar.
Esos ejemplos altruistas también existen en la esfera del personal de la Electricidad y tantas veces haya un problemas, así serán las ocasiones en que las enfrenten sin cansarse y mucho menos renunciar a trabajar.
Mientras las termoeléctricas ayer eran operadas en condiciones difíciles, el arribo de combustible para las dos patanas ubicadas en Mariel y los emplazamientos de motores de Mariel y Moa permitió que desde las 12 y 35 a.m. hasta casi las 7 am de este miércoles no hubiera déficits de capacidad de generación.
Precisamente desde horas tempranas de la mañana de hoy, la recién incorporada Guiteras presentó un problema que su colectivo está tratando de resolver antes del horario de máxima demanda, según información obtenida por el colega José Ramón Solis.
La jornada precedente tuvo menos afectación que la pronosticada, y hoy existe tendencia a la mejoría, pues la carencia de combustible en 67 centrales de generación distribuida y la patana de Santiago de Cuba provocarán un déficit de 518 MW, que es más o menos la mitad de días anteriores.
Hoy la afectación del mediodía será de 600 MW y en la noche de 940 MW, y no será mayor porque entrarán dos motores de Moa tras abastecerse de fuel oil.
Mientras existan Juana y su hermana causando problemas, los trabajadores de la Unión Eléctrica se mantendrán en la primera línea de enfrentamiento, en su zona roja, pero si los clientes o consumidores apoyan con medidas de ahorro como ya se hizo con el uso del nasobuco y otras prevenciones, las afectaciones disminuirán.
