Usted tal vez lo hay leído unas cuantas veces en nuestras páginas, el voleibol masculino cubano tendrá muy pronto un duro examen en su afán de clasificar para los Juegos Olímpicos de Paris 2024.
Será la Liga de Naciones, del 21 al 26 de mayo próximo la ocasión ideal no solo para sumar puntos al ranking mundial, sino para apreciar cuales serían los efectivos que mayor peso deben tener sobre la cancha.
Por estas fechas varios son los criollos que brillan en lagunas de las principales ligas del mundo, sin embargo sobresalen Miguel Ángel López y Juan Miguel Gutiérrez, quienes desde Brasil e Italia empujan fuerte.
El primero, baluarte del Sada Cruzeiro, acaba de coronarse campeón del Torneo Sudamericano de Clubes. Su estabilidad ofensiva y madurez volvieron a resultar determinantes.
En el caso de Gutiérrez sus niveles de efectividad son formidables a pesar de jugar en un conjunto de no mucho cartel.
Otros cubanos también se hacen notar, Roamy Alonso, Robertlandy Simón y Marlon Yant sobresalen y brindan optimismo de cara a la Liga de Naciones.
Cuba depende de sí misma. Ser feliz protagonista le permitirá asegurarse para Paris 2024 y darle al deporte una satisfacción que mucho necesita.
