El movimiento sindical y sus afiliados en Las Tunas mantienen fidelidad al legado de muchas generaciones que, en cruenta lucha contra los desmanes de las patronales antes del triunfo de la Revolución, defendieron los derechos vulnerados de los trabajadores y la unidad como piedra angular de las victorias.
Así transcendió en el acto por el aniversario 85 de la CTC, que este territorio oriental celebró en el municipio de Amancio, donde el Comité Municipal de la organización obrera laboró con ahínco y fue seleccionado como el más integral de la provincia.
Y haciendo galas de lealtad a los precursores, una representación del pueblo acudió al obelisco que inmortaliza la figura del insobornable líder sindical Amancio Rodríguez Herrero, vilmente asesinado el 18 de septiembre de 1949 junto a su compañero de lucha José Oviedo Chacón, por sicarios mujalistas, al servicio de los hacendados de la Francisco Sugar Company, cuyos tentáculos dominaban esos predios.
Los recordó Odalis Batista Pérez, secretaria general del Comité Provincial de la CTC en Las Tunas, quien en las palabras centrales enfatizó: “Para alimentar el espíritu de resistencia y de victoria en estos momentos cruciales de la Patria contamos con las enseñanzas de José Martí, Lázaro Peña y nuestro invicto Comandante en Jefe Fidel Castro, entre otros líderes sindicales y revolucionarios (…).”
Más adelante remarcó: “Ese legado es brújula que orienta y convoca a esta generación a enfrentar los desafíos actuales, en lo que sigue siendo vita, como en aquellos tiempos, la unidad de todas las fuerzas en torno al Partido Comunista y al Gobierno para juntos coronar la edificación de la sociedad socialista próspera y sostenible en bien común a la que aspiramos la inmensa mayoría de los cubanos.”
Eso fue la celebración, un acto de remembranzas desde las que se proyectaron estrategias para el presente y el futuro motivados por las páginas gloriosas de la patria, y la voluntad de no defraudar la historia que se ha vivido.
A la tarima subieron trabajadores de varios sindicatos, quienes recibieron la condición 85 Aniversario, y la Asociación de Innovadores y Racionalizadores (Anir) entregó el sello 8 Octubre, su máxima distinción a dos de sus asociados con relevante trayectoria en dos sectores claves: la Pesca y la agroindustria azucarera.
También fueron distinguidos afiliados por sus significativos aportes a la defensa de la Patria y al colectivo de la unidad empresarial de base Cupet-Las Tunas por sus donaciones a los programas de la Salud; además, cuadros y sindicatos obtuvieron agasajos por su desempeño destacado e integral.