Al filo del mediodía algunas nubes y una pertinaz llovizna, casi imperceptible, amenazaban la ya anunciada marcha de apoyo a la causa Palestina, que los organizadores en la ciudad de Las Tunas habían convocado para la 3:00 de la tarde de este martes 5 de diciembre.
Pero el calor humano y la irrenunciable decisión de expresar su total rechazo al genocidio israelí contra el pueblo palestino normalizaron el tiempo; y, un radiante sol acompañó a la multitud que colmó la calle principal de la urbe portando banderas y carteles, y vistiendo los colores que simbolizan la identidad de esa amiga nación, escenario ahora de acciones militares de exterminio masivo.
Como herederos de los valores de la amistad y el humanismo inculcados por el Líder Histórico de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz, y cultivados desde el triunfo del primero de enero de 1959, los jóvenes fueron protagonistas de la imponente manifestación de repudio al crimen, y sus voces las amplificó Daimarelis Flores Charles, Presidenta de la FEU en la Universidad de Ciencias Médicas Doctor Zoilo Marinello Vidaurreta.
La estudiante de Medicina Flores Charles rememoró: “En cada momento de la historia de nuestro país, la FEU y los universitarios han abrazado las causas justas (…)”; y, enfatizó: “Hermanos palestinos que sufren por la guerra les decimos que no están solos, que con nuestra presencia rechazamos y rechazaremos siempre la muerte de personas inocentes de todas las partes involucradas en el conflicto.”
Y exclamó: “Condenamos con esta marcha los bombardeos indiscriminados contra la población de Gaza y la destrucción de viviendas y hospitales; así como el asesinato de civiles, mujeres niños. Nuestro llamado es al cese del fuego, a la paz entre los pueblos (..)”.
Tras su alocución la multitud, encabezada por dirigentes del Partido, el gobierno y la CTC en el territorio, comenzó a caminar proclamando consignas y saludando a niños de diferentes centros escolares, quienes portaban banderas palestinas y carteles que piden el cese de los bombardeos y reclaman el derecho de sus coetáneos a una vida feliz. Los pequeños custodiaron desde las aceras la imponente caminata.
Dentro de la multitud hablé con Náyade Rachel Reyes Charón, recientemente graduada Educación Artística en la Universidad de Las Tunas, donde en breve ejercerá como profesora y me aseguró: “Estoy en esta marcha por la justicia, por la paz y la igualdad del mundo”, y consideró un genocidio el atentado que sufre hoy el pueblo palestino.
Con esos mismos sentimientos acudieron a la cita con la justicia trabajadores de todos los sectores y otros representantes de la sociedad civil cubana, quienes repudiaron el crimen y patentizaron su respaldo al derecho a la soberanía de Palestina y al respeto a su autodeterminación.
La marcha concluyó frente a la Plaza Martiana, en el centro histórico de la ciudad, sitio desde el que se rinde perenne homenaje al Héroe Nacional de Cuba, José Martí, cuyo legado constituye estímulo al abrazo indestructible con la justicia.
