No se estima déficit de capacidad de generación en el horario diurno de este viernes, y los 155 MW calculados para el nocturno pudieran ser mínimos si la unidad 6 de Nuevitas recibe combustible en el transcurso del día.
La afectación para el pico nocturno sería de corta duración, aunque podría ser insignificante si mejoran las condiciones del tiempo y puede atracar en el puerto de Nuevitad un buque con combustible para la termoeléctrica de Camagüey.
Ayer miércoles el sistema electroenergético nacional sólo tuvo dificultades durante tres horas y fue de 268 MW, mucho menos que en los días anteriores.
Varios lectores han comentado que sea por falta de combustible, rotura de termoeléctricas o averías locales, el resultado es el mismo apagón, lo cual es innegable, pero las diferencias de los motivos son considerables.
No se puede equiparar la complejidad de reparar la unidad de una termoeléctricas que cambiar un poste chocado por un vehículo.
Tampoco es lo mismo sustituir la chumacera de cualquier instalación que un transformador.
En nada se parece detener varios emplazamientos de motores de fuel oil por averías que por falta de un combustible que tan pronto se consigue, permite el suministro.
Para en cliente todo concluye en un apagón, pero para los trabajadores del sector eléctrico las diferencias son abismales, por lo cual es injusto qua una molesta interrupción por motivos locales impida ver los sacrificios para poner el sistema térmico a generar establememte los 1200 MW previstos.
Por tanto, cada motivo de apagón requiere una solución diferente y las afectaciones por su magnitud también son distintas unas de otras.