Los apagones del verano del pasado 2022 fueron parte de las herramientas para desestabilizar el país, pero el revés del déficit en la capacidad de generación se está revirtiendo desde julio y agosto últimos sin prolongados apagones.
De ahora en adelante los trabajadores del sector eléctrico avanzan en la consolidación de de la infraestructura del sistema eléctrico, sobre todo en la generación térmica, cuyo nivel de generación se ha mantenido en los 1200 MW previstos.
Esquivando las dificultades del bloqueo, se han ido adquiriendo recursos y no solo el gobierno de los Estados Unidos seguirá escuchando el clamor de los pueblos y gobiernos que votan contra el bloqueo, sino que verá a los trabajadores eléctricos hacer la luz que aparte las tinieblas del cerco.
La estrategia seguida desde febrero para recuperar capacidades de diseño de las termoeléctricas y evitar roturas, ha permitido la actual situación favorable, a pesar de estar averiada la unidad 2 de Felton y haber seis unidades en mantenimiento, incluida la Guiteras.
En este noviembre continuarán los mantenimientos programados para pocos días, pero respaldados por recursos que alistarán las maquinarias para dar respuesta a la demanda que siempre aumenta a finales y principios de cada año.
No ha habido prolongados apagones diarios de 10 y más horas a pesar de que el volumen de unidades fuera de servicio para acciones de optimización es similar a las cantidades que salían por averías el año pasado.
La entrevista al ingeniero Rubén Campos Olmos, director general de la central termoeléctrica Antonio Guiteras, realizada por el periodista José Miguel Solis, muestra las condiciones difíciles en que se han estado desarrollando los trabajos para restablecer el sistema eléctrico mediante recursos difíciles de conseguir debido al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por la nación más rica y poderosa del planeta.
Datos facilitados a Trabajadores por el colega Solis se refieren a una importante unidad cuyo aporte en el suministro alcanza volúmenes considerables, pero son un ejemplo de cómo ha habido que actuar para esquivar los mecanismos del cerco tendido para dañar el sistema eléctrico y cortar el suministro de combustible.
Los problemas para sustituir partes y piezas en la Guiteras comenzaron en 2014 cuando la estadounidense General Electric adquirió a la francesa Alsthon e impidió los suministros por esa compañía constructora de la termoeléctrica matancera.
El sistema de variación de regulación hidráulica de las bombas de alimentar fueron pagadas a Francia y encargada a la firma Alemana la Voith, que declaró no poderla suministrar, ante el temor de ser sancionada por el gobierno de los Estados Unidos.
La termoeléctrica yumurina negoció bombas de condensado, pero por tener componente de procedencia estadounidense fueron regresadas a Europa cuando ya estaban en camino hacia Cuba, lo cual provocó erogaciones superiores para comprarlas.
Durante 13 años se ha estado aplazando el mantenimiento capital que próximamente se ejecutará, pero esquivando el bloqueo el colectivo de la termoeléctrica Antonio Guiteras seguirá haciendo la luz creativamente.