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Fomentan en Holguín métodos de cocción alternativos que contribuyen al ahorro energético

Con 185 centros productivos, dos mil 800 trabajadores y la misión de elaborar alimentos para la población y sectores priorizados a base de harina y productos del agro, la Empresa Provincial Productora y Distribuidora de Alimentos de Holguín (Numa) es abanderada en la búsqueda de soluciones para sortear la contingencia energética y otras problemáticas asociadas al contexto económico  actual y continuar produciendo.

 

La Empresa Provincial Productora y Distribuidora de Alimentos se sobrepone a las carencias para cumplir su objeto social. Foto: Numa Holguín

 

Kirenia Balada Peña, directora de la entidad, que asume en la provincia el pan de la canasta básica y la producción de galletas, repostería, pastas y otros variados productos, destaca el rescate y uso de hornos de leña para contrarrestar el gasto eléctrico.

La directiva plantea que aunque cuentan con hornos eléctricos y otros consumidores de diésel, hoy se encuentran en el rescate «de aquellos hornos de leña que hemos tenido bajo métodos de conservación, mientras que otros están en los planes de reanimación y mantenimientos y muchos de ellos hasta para una inversión».

Para el ahorro de portadores energéticos, también en las diferentes instalaciones de Numa se evita la utilización de los equipos en los horarios pico, por el alto consumo que tienen.

 

Foto: Numa Holguín

 

De igual modo Balada Peña expone que Numa Holguín promueve otras alternativas para la cocción, que son exponentes de la llamada economía circular y tributan al cumplimiento de la Ley de Soberanía Alimentaria.

«En nuestros polígonos productivos también tenemos otros métodos de cocción como el empleo de biomasa no cañera y el uso de residuos de algunos de los medios que usamos. Por ejemplo, si en algunos lugares hacemos guarapo, ese desperdicio de la caña que nos queda, el bagazo, lo empleamos para cocinar, al igual que la cáscara de coco.

«Ello forma parte de la soberanía alimentaria y el cierre de los ciclos de procesos. De esa manera pues también la empresa recircula mucho de los recursos que tiene», subraya.

Bajo esa constante búsqueda e implementación de alternativas Numa sobrepasa sus tres décadas de servicio sin renunciar a su objeto social, por muy difíciles que sean las circunstancias.

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