«Uno de los mayores desafíos que hoy tiene Cuba es la movilización de recursos para implementar los objetivos de desarrollo sostenible», admitió Francisco Pichón, coordinador residente del sistema de Naciones Unidas en el país caribeño.
Al inaugurar este viernes en la Universidad de La Habana el XIX Foro de la Sociedad Civil cubana en contra del bloqueo, el funcionario enfatizó que «el bloqueo, las restricciones unilaterales externas, la exclusión de Cuba de mecanismos e instrumentos financieros internacionales, son un gran obstáculo para su desarrollo sostenible».
«Los países en desarrollo son los que más sufrieron y sufren los impactos de la COVID 19. Son los que peores situaciones de partida tienen para enfrentar los efectos del alza mundial de precios, de la inflación, de las guerras y conflictos», lamentó Pichón, frente a cientos de representantes de organizaciones no gubernamentales y activistas de movimientos sociales en la Isla.
Explicó que en Cuba actúan 22 agencias, fondos y programas de Naciones Unidas, los cuales también padecen los impactos del bloqueo.
Puso el ejemplo de cómo durante la pandemia de Covid-19 «algunos productos de carácter humanitario tuvieron que adquirirse con proveedores secundarios y a más altos precios».
«Muchos barcos tienen que hacer escalas en países vecinos, lo que ocasiona retrasos y gastos adicionales. Se nos dificultan las transferencias bancarias. La respuesta a desastres, como los provocados recientemente por el Huracán Ian se dificulta debido a la falta de proveedores, o por la recurrente necesidad de licencias especiales», detalló.
Norma Goicoechea, presidenta de la Asociación Cubana de Naciones Unidas (Acnu), explicó la importancia de la denuncia que realiza la sociedad civil en la actual coyuntura de recrudecimiento del bloqueo, y expresó la solidaridad de Cuba frente al genocidio que tiene lugar contra el pueblo palestino en Gaza.
El director de Europa del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), Rigoberto Zarza Ross, anunció por su parte, una acción política prevista en el Parlamento europeo, a partir del 16 de noviembre próximo, en contra del bloqueo a Cuba.
La iniciativa de múltiples organizaciones solidarias con Cuba consistirá en un Tribunal simbólico para denunciar la criminal política, donde reconocidos juristas de países como Alemania, Bélgica, Francia, Grecia y Portugal harán de jueces y fiscales frente al gobierno de los Estados Unidos.
Se denunciarán las afectaciones para la salud, la economía, así como la guerra comunicacional y los efectos nocivos de la inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo, explicó.
El foro continuó con el trabajo en tres comisiones donde en la voz de la ciudadanía se repasaron los principales efectos del bloqueo, en temas como la seguridad alimentaria, la salud y el bienestar de la población y la igualdad de género y empoderamiento de la mujer.
