No diremos la moraleja sobre lo que hicieron varios monos dentro de una jaula, en cuyo techo colgaban unos racimos de plátanos que al ser tocados se activaba un dispositivo que provocaba lluvia artificial dentro del recinto.
Al crearse el reflejo condicionado de que si uno trepaba, mojaban a los otros, entre sí impedían que cualquiera subiera.
Los animales se sustituyeron uno por uno hasta no quedar ninguno de los que tuvo la experiencia de empaparse porque otro tocara un plátano.
Cuando llegaba uno nuevo, se sumaba a la acción de no dejar subir a ninguno hasta los racimos.
¿Cuál es la moraleja?