Nuestro Héroe Nacional describe a los anamitas
José Martí inicia el cuarto número de su revista La Edad de Oro, publicado en octubre de 1889; con un trabajo titulado «Un paseo por la tierra de los anamitas», donde describe las costumbres, historia, religión, cultura e idiosincrasia de los pobladores de Anam, como se denominaba en esa época al territorio ubicado al este de la península de Indochina, fundamentalmente en el centro de Vietnam.
Nuestro Apóstol detalló a esta sociedad asiática en el siglo XIX, sus casas de bambú, teatros y pagodas; sus tradiciones e identidad; y reflexionó en esta obra sobre los valores más preciados de los seres humanos.
Como un pueblo trabajador y defensor de su libertad y de su tierra, que se ha estado siempre defendiendo, tanto como los más bravos, los califica en varias ocasiones nuestro Héroe Nacional. «(…) y cuando los franceses nos han venido a quitar nuestro Hanoi, nuestro Hue, nuestras ciudades de palacios de madera, nuestros puertos llenos de casas de bambú y de barcos de junco, nuestros almacenes de pescado y arroz, todavía, con estos ojos de almendra, ¡hemos sabido morir, miles sobre miles, para cerrarles el camino! Ahora son nuestros amos; pero mañana ¡quién sabe!», refiere Martí.
19 de mayo: fecha simbólica de unión entre ambos pueblos
Quiso la historia hermanar también a Cuba y Vietnam en la fecha del 19 de mayo. Precisamente, en 1890 nació el inolvidable y venerado Ho Chi Minh; mientras que ese mismo día en 1895, justamente cinco años después, cae en combate nuestro Héroe Nacional José Martí. Este hecho histórico fue quizás un presagio de la unión entre nuestros pueblos.
Cuba, primer país del hemisferio occidental en establecer relaciones diplomáticas con Vietnam
El 2 de diciembre de 1960, el joven Gobierno Revolucionario dirigido por Fidel Castro, convierte a Cuba en el primer país del hemisferio occidental en establecer relaciones diplomáticas plenas con Vietnam.
Al respecto, durante el Seminario «El aporte de Fidel y Ho Chi Minh a las relaciones de hermandad entre Cuba y Vietnam»; Fredesmán Turró González, exembajador de Cuba en la hermana nación asiática, recordó recientemente que a fines del mes de noviembre de 1960 –cuando una delegación cubana, encabezada por el Comandante Ernesto Che Guevara, visitaba Moscú–, Fidel instruye al Che que el compañero Héctor Rodríguez Llompart, integrante de dicha delegación, y quien a la sazón era viceministro de Relaciones Exteriores, viaje a Hanói y deje establecidas las relaciones diplomáticas entre los dos países.
«Luego, el 2 de diciembre de 1960, Héctor Rodríguez Llompart y el viceministro de Relaciones Exteriores de Vietnam, Hoang Van Loi, rubricaron en Hanói el documento que las dejó establecidas», precisó en este evento teórico.
En febrero de 1961, Vietnam abre su Embajada en La Habana y, a propuesta de Fidel, el Gobierno cubano se hace cargo de los gastos de dicha misión diplomática, teniendo en cuenta las dificultades por las que atravesaba el país indochino. En tanto, en julio de 1962, se instaló en Hanói la primera Embajada cubana.
Nuestro país fue el primero en enviar un Embajador ante el Frente Nacional de Liberación y también el primero que recibió con carácter oficial a un alto representante de ese Frente, el compañero Tran Buu Kiem.
Intercambios académicos
En mayo de 1961 llega a Cuba la primera delegación oficial vietnamita, encabezada por el compañero Hoàng Minh Giam, ministro de Cultura, para participar en las festividades por el Primero de Mayo. Durante el recibimiento al dirigente del país asiático, el Comandante en Jefe traslada a la dirección del Gobierno vietnamita la disposición de nuestra nación de recibir a un grupo de jóvenes para que se preparen en el estudio del idioma español en la Mayor de las Antillas. Precisamente, en el otoño de ese año, los primeros 23 estudiantes vietnamitas arriban a Cuba.
Desde entonces, miles de vietnamitas han egresado de universidades cubanas en diversas especialidades.
Comité Cubano de Solidaridad con Vietnam del Sur
El 25 de septiembre de 1963 se creó el Comité Cubano de Solidaridad con Vietnam del Sur –el primero de su tipo en el mundo y antecesor de la Asociación de Amistad Cuba-Vietnam–, y su primera presidenta fue la Heroína del Moncada, Melba Hernández, nombrada por Fidel.
Esta agrupación concentró sus esfuerzos en difundir la lucha del pueblo de Vietnam, expresar enérgicamente el rechazo a la política guerrerista de Estados Unidos y la solidaridad con la hermana nación asiática, tanto en todos los sectores de la sociedad y todos los rincones de nuestro país, como con una intensa actividad internacional.
Para este propósito, contó con el apoyo del Movimiento Cubano por la Paz y el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), y su mesa fundadora fue integrada por representantes de las organizaciones de masas, encabezadas por la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), en la que participaron compañeras como Vilma Espín, Yolanda Ferrer Gómez y Marta Rojas, entre otros destacados miembros.
Melba Hernández fue posteriormente la primera mujer Embajadora de Cuba en Vietnam a fines de los años 70 del pasado siglo.
Ballet Nacional de Cuba entrega su arte al pueblo vietnamita
En el año 1964, el Ballet Nacional de Cuba (BNC), encabezado por Alicia Alonso, visitó Hanói, convirtiéndose en la primera compañía cultural que viajó al país asiático e, incluso, fue recibida por Ho Chi Minh. Alicia Alonso recibió, de manos del Presidente vietnamita, la Orden del Trabajo de Primera Clase.
En 1978, el BNC se presentó en Ciudad Ho Chi Minh ante 17 000 espectadores, y la delegación fue galardonada con la Medalla de la Amistad, cumpliendo así un anhelo compartido por Ho Chi Minh y Alicia Alonso.
« (…) al hablar de nuestros planes futuros, queremos decir que nuestra mirilla está puesta ahora en un objetivo: actuar en un “Saigón liberado”», había expresado Alicia; quien recordaba las palabras que les dedicara el Tío Ho en el intercambio con la compañía en 1964 cuando afirmó que el pueblo vietnamita, en un tiempo no muy lejano, haría posible que los artistas del Ballet cubano pudieran actuar no sólo en Vietnam del Norte, sino en todo Vietnam, pues la Patria sería liberada en todos sus confines.
Sobre la histórica presentación del BNC en 1978 recoge la Revista Cuba en el Ballet: «El éxito de las actuaciones de los bailarines cubanos en Viet Nam, fue resumido por la soviética Svetlana Chaplina, joven crítica residente en Viet Nam: “Los vietnamitas son discretos al expresar sus sentimientos. Pero esta vez estallaron los aplausos. El escenario estaba cubierto de cestas de flores y los espectadores no cesaban de aplaudir. Los conciertos del pequeño grupo del Ballet Nacional de Cuba se convirtieron en una gran fiesta de la amistad cubano-vietnamita”».
El Che ratifica en Naciones Unidas la solidaridad con Vietnam
En su discurso pronunciado como representante de la República de Cuba en la Asamblea General de las Naciones Unidas, el 11 de diciembre de 1964; el Comandante Ernesto Che Guevara expresó el respaldo a la causa vietnamita y denunció la guerra imperialista estadounidense.
«La República Democrática de Viet Nam, que sabe de todas estas historias de agresiones como pocos pueblos en la tierra, ha visto una vez más violadas sus fronteras, ha visto como aviones de bombardeo y cazas enemigos disparaban contra sus instalaciones; como los barcos de guerra norteamericanos, violando aguas territoriales, atacaban sus puestos navales.
«En estos instantes, sobre la República Democrática de Viet Nam pesa la amenaza de que los guerreristas norteamericanos extiendan abiertamente sobre su territorio y su pueblo la guerra que, desde hace varios años, están llevando a cabo contra el pueblo de Viet Nam del Sur. La Unión Soviética y la República Popular China, han hecho advertencias serias a los Estados Unidos. Estamos frente a un caso en el cual la paz del mundo está en peligro, pero, además, la vida de millones de seres de toda esta zona del Asia está constantemente amenazada, dependiendo de los caprichos del invasor norteamericano», expresó el Che desde el podio de la Asamblea General de la ONU.
Asociación de Amistad Vietnam-Cuba
En enero de 1965 se fundó en Hanói la Asociación de Amistad Vietnam-Cuba (AAVC) para promover la solidaridad internacional con Vietnam del Sur y difundir la realidad de la guerra, de acuerdo con información del Dr. Ruvislei González Sáez, del Centro de Investigaciones de Política Internacional (CIPI). Cuando finalizó la guerra, la AAVC reorientó su labor a fortalecer los lazos entre los dos pueblos.
Por Vietnam estamos dispuestos a derramar nuestra sangre
El Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, en un discurso pronunciado el 2 de enero de 1966 en la celebración del VII Aniversario de la Revolución, como Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Primer Ministro del Gobierno Revolucionario, expresó en este acto de masas realizado en la Plaza de la Revolución con la participación de delegados a la Conferencia Tricontinental su solidaridad con la hermana nación asiática.
En esa oportunidad, señaló: «Porque al pueblo de Viet Nam estamos dispuestos a darle no ya nuestro azúcar, sino nuestra sangre, ¡que vale mucho más que el azúcar! Y eso lo sabe perfectamente bien el pueblo de Viet Nam y la dirección del heroico Partido Comunista de Viet Nam».
Posteriormente, en su discurso en el Resumen del Acto de Solidaridad con Vietnam del Sur, en ocasión de la visita del compañero Tran Buu Kiem, representante del Frente Nacional de Liberación de su país, efectuado en la Plaza de la Revolución el 3 de junio de 1969; Fidel profundizó en el verdadero significado de esta relevante expresión solidaria y símbolo de estrecha unidad entre ambos pueblos.
«Se ha dicho en ocasiones por los compañeros vietnamitas que ellos se sienten agradecidos a nuestro pueblo por su solidaridad, que nos agradecen la expresión de que por Viet Nam estamos dispuestos a dar hasta nuestra propia sangre. Y sin ningún tipo de formalidad, por elemental sentido de justicia, somos nosotros, somos los pueblos amenazados por el imperialismo, los países que luchan por su liberación o se enfrentan a las amenazas yankis, quienes tenemos que estarle agradecidos al pueblo vietnamita. Y entre esos países, en primer lugar, nosotros», explicaba el Comandante en Jefe.
En este sentido, agregó que «cuando nosotros decimos que por Viet Nam estamos dispuestos a derramar nuestra sangre no decimos nada extraordinario, ¡porque el pueblo de Viet Nam no ha ofrecido derramar su sangre por nosotros y por otros pueblos, sino que ha derramado su sangre por nosotros y por otros pueblos!».
Conferencia Tricontinental, decisivo respaldo internacional a la lucha vietnamita
En enero de 1966, La Habana acogió la sede de la Primera Conferencia de Solidaridad de los Pueblos de Asia, África y América Latina (Tricontinental), que devino un decisivo foro de apoyo al heroico pueblo de Vietnam.
En el acto de clausura de este importante evento, celebrado en el teatro Chaplin el 15 de enero de ese año; el Comandante en Jefe Fidel Castro manifestó: «Y por eso, consideramos que esta conferencia de la solidaridad de los pueblos de los tres continentes ha expresado y ha actuado de manera que el apoyo y el sentimiento de solidaridad hacia el Viet Nam se ha hecho evidente, y además crecerá. Y lo mismo que hacia Viet Nam, hacia Lao y hacia Cambodia, que son los pueblos allí agredidos o que corren riesgos de agresión».
Vietnam, el más extraordinario ejemplo de heroísmo
La extraordinaria y heroica lucha del pueblo vietnamita y su Frente Nacional de Liberación, la justa causa contra los invasores librada durante varias décadas por el hermano país asiático, despertó profundos sentimientos de admiración en el pueblo cubano.
Fidel calificó su épica gesta como «el más extraordinario ejemplo de heroísmo que hayamos tenido oportunidad de conocer» y a Vietnam como un gran baluarte de la revolución y de la lucha antimperialista «porque ningún pueblo ha hecho mayores sacrificios, ningún pueblo ha hecho tan extraordinarios sacrificios en la lucha contra el imperialismo como ha realizado el pueblo de Viet Nam».
En numerosos discursos en esa época, el Comandante en Jefe ratificó nuestro respaldo al pueblo vietnamita y argumentó cómo el poderío militar estadounidense «se estrelló literalmente contra la resistencia del pueblo de Viet Nam». El heroísmo de la nación indochina se impuso a la crueldad y la barbarie de la guerra imperialista, lo que llevó a Fidel a razonar si « ¿Acaso hay algún otro pueblo en toda la historia del mundo que haya dado una prueba semejante de vocación de libertad?».
A pesar de la distancia geográfica, la contienda del pueblo vietnamita se sintió como un hecho muy cercano al pueblo cubano, como algo muy próximo a nuestro país. Sobre este sentimiento genuino reflexionó Fidel: «Los vietnamitas nos recuerdan lo mejor de la humanidad. Nos recuerdan lo más digno, lo más glorioso, lo más abnegado, lo más heroico que pueda albergar el corazón humano. Los vietnamitas nos recuerdan la historia de nuestro país. Los vietnamitas nos recuerdan a nuestros mambises luchando también solos durante 10 años, durante casi 30 años por su independencia; combatiendo contra un ejército técnicamente bien armado en aquella época con machetes, con fusiles casi desprovistos de municiones. Los vietnamitas nos recuerdan lo más entrañable, lo más querido de este país: nos recuerdan a todos los que han luchado, a todos los que han caído, a todos los que se han sacrificado por nuestra patria».
«Por eso se explica nuestra simpatía, nuestro respeto, nuestra admiración, nuestro cariño hacia los combatientes vietnamitas, hacia el Venerable —como le llaman ellos— presidente de la República Democrática de Viet Nam, el compañero Ho Chi Minh», concluye el líder histórico de la Revolución Cubana en su discurso pronunciado el 3 de junio de 1969.
Donaciones de azúcar y de arroz como gestos solidarios
En múltiples ocasiones, Cuba realizó donaciones de azúcar a Vietnam durante el período de su lucha contra el imperialismo estadounidense, hasta alcanzar la cifra de miles de toneladas métricas. Barcos de nuestro país llevaron miles de toneladas de ayuda a Vietnam hasta el puerto de Haiphong, bombardeado continuamente, especialmente azúcar.
Por su parte, en los momentos más complejos de la economía de nuestro país, la hermana nación asiática ha entregado donaciones de arroz a lo largo de los años. Ambos gestos patentizan la solidaridad entre los dos pueblos, Partidos, Estados y Gobiernos frente a las difíciles situaciones que han enfrentado nuestros países en diferentes momentos históricos.
Raúl integró la primera delegación de alto nivel cubana a Vietnam
El presidente Osvaldo Dorticós y Raúl Castro Ruz, entonces ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, llegaron el 29 de octubre de 1966 a Vietnam al frente de la primera delegación de alto nivel cubana.
En el discurso pronunciado por el General de Ejército Raúl Castro Ruz, primer secretario del Comité Central del Partido y presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, al recibir la Orden Estrella Dorada de Vietnam en el Palacio de la Revolución, el 29 de marzo de 2018, señaló como un momento significativo de aquella visita su encuentro con el legendario y excepcional revolucionario Ho Chi Minh.
«Recuerdo el emotivo encuentro que sostuve con él durante mi visita a su querido país, en octubre de 1966; las sentidas palabras de Ho Chi Minh de agradecimiento por la ayuda de Cuba y de Fidel; y acerca de los sólidos cimientos sobre los que forjamos los vínculos que nos unen: “(…) nuestros países geográficamente son antípodas, pero hay una identificación completa en lo moral”, afirmó. Por esa fecha, ya nos habíamos movilizado para apoyar su lucha por la liberación nacional y la reunificación del país», refirió Raúl respecto a este hecho.
Ho Chi Minh: «el Sol nunca se pone para la bandera de la Revolución»
En ocasión de aquella visita de la primera delegación de alto nivel cubana a Vietnam, en octubre de 1966, el inolvidable Tío Ho expresó: «Solamente quiero decir que entre Cuba y Vietnam hay tanta distancia que cuando uno duerme el otro está despierto. Antiguamente se decía del imperio inglés que el Sol nunca se ponía para la bandera inglesa. Pero ahora hay que decir que el Sol nunca se pone para la bandera de la Revolución. Es decir, que nuestros países geográficamente son antípodas, pero hay una identificación completa en lo moral».
1967: «Año del Viet Nam Heroico»
Fidel, en el discurso pronunciado en el desfile militar y concentración efectuados en la Plaza de la Revolución con motivo del VIII aniversario de la Revolución el 2 de enero de 1967, propuso ante el pueblo dedicar el año 1967 a Vietnam con el nombre «Año del Viet Nam Heroico».
« (…) más que palabras, queremos hacia Viet Nam un gesto que lo diga todo: y es que este año, este año nosotros lo dediquemos a Viet Nam (APLAUSOS), y que este año sea el “Año del Viet Nam Heroico” (APLAUSOS PROLONGADOS). Y eso, eso que lo dice todo, esa es la proposición que hacemos a ustedes: que el año 1967 sea el “Año del Viet Nam Heroico”. Y los que estén de acuerdo que levanten la mano (TODO EL PÚBLICO PRESENTE LEVANTA LA MANO. APLAUSOS PROLONGADOS)», recogen las versiones taquigráficas del discurso del Comandante en Jefe ese día.
Ernesto Che Guevara: «Crear dos, tres… muchos Viet-Nam, es la consigna»
En un extenso texto escrito por el Che en un campo de entrenamiento de Pinar del Río, antes de alistarse para Bolivia en 1966, y divulgado por primera vez el 16 de abril de 1967 en un Suplemento Especial que se convirtió más tarde en la revista Tricontinental, publicado con el título «Crear dos, tres… muchos Viet-Nam, es la consigna», más célebre como su conocido «Mensaje a la Tricontinental»; el Comandante Ernesto Guevara planteaba con admiración, respecto a la lucha del país asiático contra el imperialismo estadounidense y sus aliados: «Y: ¡qué grandeza la de ese pueblo! ¡Qué estoicismo y valor, el de ese pueblo! Y qué lección para el mundo entraña esa lucha».
En la lucha antimperialista de los pueblos a nivel mundial, el Che reflexionaba que: « ¡Cómo podríamos mirar el futuro de luminoso y cercano, si dos, tres, muchos Viet Nam florecieran en la superficie del globo, con su cuota de muerte y sus tragedias inmensas, con su heroísmo cotidiano, con sus golpes repetidos al imperialismo, con la obligación que entraña para éste de dispersar sus fuerzas, bajo el embate del odio creciente de los pueblos del mundo! Y si todos fuéramos capaces de unirnos, para que nuestros golpes fueran más sólidos y certeros, para que la ayuda de todo tipo a los pueblos en lucha fuera aún más efectiva, ¡qué grande sería el futuro, y qué cercano!».
El Guerrillero Heroico expresó en múltiples ocasiones su solidaridad con la justa causa del pueblo vietnamita y recibió a varias delegaciones del país indochino de visita en La Habana.
Revistas dedicaron ediciones y múltiples artículos a la causa vietnamita
La guerra en Vietnam estuvo entre los acontecimientos más abordados en las revistas Pensamiento Crítico y Revolución y Cultura. En especial, Pensamiento Crítico le dedicó la edición de mayo de 1967; y el contenido fundamental de su número de octubre de 1969, como homenaje a Ho Chi Minh, tras su fallecimiento.
«Por su parte, Revolución y Cultura circuló su número dedicado a Vietnam pocos días después de la celebración en la Plaza de la Revolución del acto de solidaridad con Vietnam del Sur, el 3 de junio de 1969, en ocasión de la visita del compañero Tran Buu Kiem, miembro del Presidium del Comité Central del Frente Nacional de Liberación de Vietnam del Sur. Resultó apreciable la colaboración en las ediciones de junio y agosto de ese año de la periodista cubana Marta Rojas, integrante del Comité Cubano de Solidaridad con Vietnam. Como reportera del periódico Revolución visitó por primera vez a este país en 1965, donde tuvo vivencias muy conmovedoras de la guerra», refiere un artículo de la investigadora Vilma N. Ponce Suárez, de la Biblioteca Nacional «José Martí».
Asimismo, numerosas ilustraciones en Revolución y Cultura estuvieron dedicadas a la guerra en Vietnam.
Vietnam en el cartel cubano
Un artículo de la periodista de Prensa Latina, Mariela Pérez Valenzuela, rememora que reconocidos artistas de la plástica cubana crearon simbólicos carteles que denunciaron a nivel mundial con distintos estilos creativos, pero con esclarecedores mensajes políticos, la guerra genocida que Estados Unidos impuso, con su ambición geopolítica, al heroico pueblo de Vietnam.
Obras de René Mederos Pazos, Alfredo González Rostgaard, José Gómez Fresquet (Frémez), Jesús Forjans Boade y Félix Beltrán, entre otros, recrearon artísticamente la solidaridad con el hermano país asiático.
Los carteles cubanos sobre Vietnam se convirtieron en otra arma de lucha contra la guerra de Estados Unidos, en elemento de movilización social, en metáforas visuales que transmitían mensajes políticos, agrega Pérez Valenzuela.
«La función comunicativa del cartel jugó un rol fundamental en las campañas de solidaridad de Cuba con el agredido país asiático. El aporte de los autores cubanos, con su estética de carácter universal, permitió a millones de seres humanos identificarse con la realidad y la epopeya de un pueblo que defendió su país», concluye.
Varios de esos carteles fueron publicados por la Organización de Solidaridad con los Pueblos de Asia, África y América Latina (OSPAAAL).
En el documental
El emblemático documental Hanoi, martes 13; dirigido por Santiago Álvarez y realizado en 1967, con una estructura poética y narrativa, teniendo como texto párrafos de José Martí de su obra La Edad de Oro, muestra cómo luchó por su libertad el heroico pueblo vietnamita.
Este emotivo documental es uno de los más premiados de Santiago Álvarez a nivel internacional y constituyó un fiel retrato de esa sociedad en la época, en clara muestra solidaria con la nación asiática. Mientras los norteamericanos divulgaban al mundo su versión de esta guerra; Santiago los desenmascaró con su obra, testimonio aplastante de la verdadera realidad que en tiempos de la guerra vivió el pueblo vietnamita.
El cartel creado por Alfredo González Rostgaard para la promoción del cortometraje refleja dos bombas en posición vertical con la imagen del entonces Presidente de Estados Unidos, Lyndon B. Johnson; en alusión al bombardeo ordenado por el mandatario norteamericano a la capital vietnamita el 13 de diciembre de 1966.
« (…) eran las 3 menos diez de la tarde cuando sonó la primera bomba. De inmediato comenzaron a funcionar las sirenas de alarma (…) El bombardeo a Hanói fue realizado por más de doscientos aviones norteamericanos (…) el cielo de Hanói se cubrió en esos momentos de motas negras y humeantes que indicaban que la defensa antiaérea (…) era precisa y eficiente. Los doce aviones derribados lo confirman. Los yanquis bombardearon ese día uno de los barrios más modestos y poblados. Lo incendiaron con cohetes. «En esa zona de Hanói (…) causaron más de un centenar de víctimas entre muertos y heridos. Iván Nápoles, nuestro camarógrafo, registró escenas dantescas de niños buscando a sus padres y de padres buscando a sus hijos», manifestó en una entrevista Santiago Álvarez.
Por su parte, el documental 79 primaveras, también de Santiago Álvarez y estrenado en 1969, presenta la vida y la obra del dirigente vietnamita Ho Chi Minh, sus luchas y la reacción del pueblo ante su muerte.
Hechos relacionados con la situación en Vietnam llegaron también a varias emisiones del Noticiero ICAIC Latinoamericano, y a los documentales L.B.J. (1968), La guerra olvidada (1967), Los cuatro puentes (1974), Los dragones de Ha-Long (1976), El gran salto al vacío (1979); y especialmente al documental Abril de Vietnam en el año del gato (1975), este último encargado como homenaje para celebrar la victoria y la unificación del país asiático.
Nueva trova cubana, solidaria con Vietnam
«Madre, en tu día,
–Madre Patria y Madre Revolución–,
madre, en tu día,
tus muchachos barren minas de Haiphong.»
Canción Madre, de Silvio Rodríguez
Canciones de Silvio Rodríguez como Vietnam, Tres mil pájaros, y Madre; y Yo Vi La Sangre de Un Niño Brotar, de Pablo Milanés, plasmaron la gesta del pueblo vietnamita a través de la nueva trova cubana.
«Por aquellos tiempos también escribí y canté un par de canciones en una obra de teatro universitario, llamada “Vietnam por ejemplo”, escrita por Víctor Cassaus. Nicola estaba componiendo “Por la vida”, Martín Rojas “Cuento para un niño”, y yo “Bajo el arco del sol” y “El rey de las flores”. Los poetas hacían poemas al pueblo vietnamita. La danza imitaba el dolor de Indochina. El cine… Santiago Álvarez fue el gran cantor de Vietnam, si es que hubo uno entre cubanos. Y aquellas, sus obras de defensa, resultaron ser obras maestras. «Vietnam fue el espíritu de una época, parte esencial de la identidad de los que vivimos los años 60. Luego el Che recomendó a la Tricontinental: “Crear dos, tres, muchos Vietnam…”. Y espíritus mayores, como Leo Brouwer y Luigi Nono, hicieron arte de sus palabras», comentó Silvio Rodríguez respecto a la lucha en Vietnam, en diálogo con Nelson Domínguez Morera (Noel) publicado por algunos medios de prensa.
Cuba, también el primer país del mundo en reconocer el Frente de Liberación Nacional de Vietnam del Sur
En 1969, Cuba se convierte en el primer país en reconocer al Gobierno Revolucionario Provisional de Vietnam del Sur. Fidel designó como Embajador ante dicho gobierno, a Raúl Valdés Vivó, y se abre una Embajada en las selvas de Tay Ninh, de forma simbólica.
Condolencias de Fidel por el fallecimiento de Ho Chi Minh
El líder histórico de la Revolución Cubana Fidel Castro Ruz, al conocer del lamentable fallecimiento del Presidente Ho Chi Minh el 2 de septiembre de 1969, envió un mensaje de condolencias al Comité Central del Partido de los Trabajadores de Vietnam, donde resaltó que: «El compañero Ho Chi Minh pertenece a la singular estirpe de los hombres cuya muerte es simiente de vida y perenne irradiación de estímulos y, por eso, continuará guiando hasta el triunfo total y definitivo, ya a las puertas, al pueblo vietnamita. El pueblo de Cuba, que siente como propio el dolor del pueblo de Viet Nam, rinde en pie de lucha su emocionado tributo de admiración y cariño al infatigable peleador internacionalista y levanta sus banderas como homenaje condigno a quien jamás plegó el estandarte que el pueblo vietnamita puso con absoluta confianza en sus manos».
Asimismo, acudió a la Embajada de Vietnam a firmar el libro de condolencias y rendirle tributo al líder.
Numerosos centros en Cuba llevan el nombre de Vietnam o de próceres de esa hermana nación
Como otra muestra de solidaridad, admiración y apoyo a la causa vietnamita, varios centros a lo largo del país fueron nombrados en honor a este pueblo.
« ¡Porque nada producía un eco tan profundo en el corazón de nuestro pueblo como la lucha del pueblo vietnamita!, y en nuestras fábricas, en nuestras escuelas, en nuestras ciudades, en nuestros campos, en nuestras organizaciones de masas y en el Partido, se expresaba de mil formas diversas la solidaridad con Viet Nam. Y hay escuelas, hay centros de trabajo, hay muchos lugares que llevan ese nombre glorioso y heroico; y muchas de nuestras brigadas de trabajadores llevan el nombre de Viet Nam o de Ho Chi Minh», reconoció Fidel en el discurso pronunciado en el Acto de Solidaridad y Amistad con el Pueblo Vietnamita, con motivo de la visita a Cuba de la delegación del Partido y del Gobierno de la República Democrática de Vietnam, encabezada por el compañero Pham Van Dong, miembro del Buró Político del Comité Central del Partido de los Trabajadores de Vietnam y Primer Ministro del Gobierno de La República Democrática de Vietnam, el 26 de marzo de 1974.
Cooperación médica cubana en tiempos de la guerra
La hermana nación asiática recibió también la cooperación y solidaridad de profesionales de la Salud cubanos en tiempos de la guerra. Fidel lo había anunciado frente a la reanudación de los criminales bombardeos por parte del Gobierno de Estados Unidos en Vietnam, en su discurso pronunciado en el Desfile y Concentración Obrera en Conmemoración del Primero de Mayo, efectuado en la Plaza de la Revolución, el 1ro. de mayo de 1972.
«En expresión de nuestra solidaridad hacia el pueblo hermano de Viet Nam, tan pronto como comenzaron los bombardeos, nuestro Partido ofreció al Partido y al Gobierno vietnamitas el aporte de una brigada de médicos para ayudar frente a las víctimas de los bombardeos. Y el próximo miércoles saldrá para Viet Nam una brigada de médicos cubanos, compuesta por seis cirujanos, tres anestesistas y seis enfermeras. Quince cubanos que van allí a dar su modesto aporte y a tratar de salvar algunas vidas. Pero si los vietnamitas necesitan más médicos, ¡tendrán más médicos! Si los vietnamitas necesitan plasma y necesitan sangre, ¡tendrán nuestro plasma y tendrán nuestra sangre!», aseguró.
Posteriormente, en un discurso el 26 de marzo de 1974, a propósito de los ataques del imperialismo estadounidense en tierras vietnamitas y la abnegación de nuestros galenos; el Comandante en Jefe ponderó el hecho de que nuestros médicos saben cómo atacaban los yanquis a los hospitales, porque ellos tuvieron que operar allí bajo el bombardeo y con los techos de las salas de operaciones derrumbándose.
Actualmente se encuentran en Vietnam médicos cubanos que laboran en diferentes provincias de ese país.
La histórica primera visita de Fidel a Vietnam
Del 12 al 17 de septiembre de 1973, Fidel Castro hizo la primera de sus tres visitas a Vietnam, convirtiéndose en el primer y único líder mundial, Jefe de Estado o de Gobierno, presente en los territorios liberados de Vietnam del Sur que aún se encontraban bajo la amenaza de los bombardeos estadounidenses. Esta histórica visita marcó un hito en las tradicionales relaciones de amistad y solidaridad entre Cuba y Vietnam.
«Era conocido y así lo había expresado en reiteradas ocasiones, el interés de Fidel por tener la satisfacción y oportunidad de ese contacto cercano, humano y personal con el pueblo vietnamita, sus heroicos combatientes y sus dirigentes. El líder histórico de la Revolución Cubana comprendía que allí se libraba una batalla no solo por Vietnam, sino por todas las causas nobles y justas, por el derecho de las naciones a decidir su destino y por el Socialismo», declaró a propósito de este hecho el miembro del Buró Político y Secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Roberto Morales Ojeda, durante la conmemoración en La Habana por el aniversario 50 de la primera visita de Fidel a Vietnam.
En esa oportunidad de 1973 los múltiples contactos con el pueblo en los lugares visitados, las conversaciones oficiales con los dirigentes vietnamitas, el recorrido por la casa y el sitio de trabajo de Ho Chi Minh, su visita a los territorios liberados del sur en compañía del primer ministro Phan Van Dong, el recorrido por los lugares donde la guerra alcanzó sus niveles más destructivos, entre otros distintivos momentos, tuvieron un impacto importante en el Comandante en Jefe.
«La imagen de Fidel enarbolando la bandera del Frente de Liberación Nacional de Vietnam del Sur en la provincia Quang Tri brindaba un gran estímulo y fuerza moral al pueblo y al Ejército Popular de Vietnam en aquella etapa clave de lucha por la liberación de Vietnam del Sur y por la reunificación de nuestra Patria; una etapa que culminó con la victoria final de la histórica Operación Ofensiva Ho Chi Minh el 30 de abril de 1975. Aquel gesto solidario de Fidel contribuía a fortalecer aún más al movimiento mundial de solidaridad con Vietnam», así manifestó a Cubadebate el Embajador de la República Socialista de Vietnam en Cuba, Le Thanh Tung.
Como enfatizaría el propio Fidel, en su discurso del 15 de septiembre de 1973: «Cuba fue el primer país que reconoció al Gobierno Revolucionario Provisional de Viet Nam del Sur; Cuba fue el primer país en enviar una representación diplomática al territorio liberado, ante el Gobierno Revolucionario Provisional de Viet Nam del Sur; y Cuba se honra en el día de hoy en ser el primer Partido y el primer Gobierno que manda una delegación oficial al territorio liberado de Viet Nam del Sur».
