Luego de las dos primeras fechas del Campeonato Mundial de Atletismo con sede en Budapest, Hungría, cuatro cubanos certificaron boletos a sus respectivas finales.
En la jornada del sábado las buenas noticias llegaron con los triplistas Lázaro Martínez y Cristian Nápoles, quienes se clasificaron a la discusión de preseas del triple salto este lunes.
Tras brincos de 16,55 y 16,50 metros(m), Martínez, campeón mundial bajo techo del año 2022, consiguió avanzar en el último intento al estirarse hasta los 17,12 m; al tiempo que Nápoles concretó el pase igualmente en la última oportunidad con marca de 16,95 m.
La clasificatoria fue ampliamente dominada por el joven jamaicano de 18 años Jaydon Hibbert, voló hasta los 17,70 m, el único que sobrepasó los 17,15 m que exigía la competencia.
Por otra parte, el representante cubano en el lanzamiento del martillo, Ronald Mencía, ancló en el puesto 26 de la fase preliminar con disparo de 71,72 m, lejos de su mejor registro (76,66 conseguido este año), que le hubiera servido para incluirse en la final.
Por último, en la jornada inaugural también hubo presencia cubana en el lanzamiento del disco con Mario Díaz, quien solo pudo llegar hasta los 58,03 m, distante de los 66,50 que se pedían para llegar a la final. Díaz ancló en el puesto 33 entre 35 competidores.
Este domingo las clasificaciones de Silinda Morales en el disco y Luis Enrique Zayas en el salto de altura resultaron las actuaciones más relevantes para la delegación cubana, junto con el pase a semifinales de Roxana Gómez en los 400 metros.
Morales se coló en la disputa por las medallas con un envío de 62,76 m, consumado en su tercer intento, luego de un foul y un 60,54.
Esta prueba fue liderada por la campeona olímpica estadounidense Valarie Allman (67,14), seguida por la china Bin Feng (65,68) y la croata Sandra Perkovi (65,62). La final será el martes y la cubana tiene margen de mejora, pues ostenta 65,06 m de marca personal.
Asimismo, en el salto de altura el campeón panamericano de Lima 2019, Luis Enrique Zayas, logró incluirse en la final tras una fase eliminatoria que le exigió el máximo. El cubano eligió no saltar sobre los 2,14 m y pasar directamente a los 2,18, altura en la que fallaron los dos primeros intentos antes de vencerla. El siguiente nivel fue el 2,22, reto que superó en la primera oportunidad.
Posteriormente Zayas consiguió los 2,25 y los 2,28, no sin antes fallar en ambas alturas los dos primeros intentos. Los atletas de mayor desempeño fueron el japonés Ryoichi Akamatsu, el estadounidense JuVaughn Harrison y el campeón olímpico catarí Mutaz Essa Barshim, todos con 2,28, dejaron la escena lista para las medallas del martes.
En los 400 metros Roxana Gómez quedó segunda de su heat con crono de 50.86 segundos, solo superada por la jamaicana Nickisha Price (58.38). De esta forma se incluyó en las semifinales de este lunes con el decimosegundo mejor tiempo de las seis series eliminatorias. La laureada dominicana Marileidy Paulino reafirmó su candidatura con registro de 49.90.
La peor noticia para Cuba este domingo se dio con la descalificación de la velocista Yunisleydis García en la eliminatoria de los 100 metros.
Hitos en Budapest
– España se coronó como la reina de los 20 kilómetros de marcha, luego de llevarse el título en ambos sexos, gracias a las actuaciones de Álvaro Martín (1:17:32 horas) y María Pérez (1:26:51).
– Ryan Crouser, bicampeón olímpico, se adjudicó su segundo título del orbe con récord para los campeonatos mundiales en impulsión de la bala (23, 51 m), a pesar de competir con dos coágulos de sangre en la pantorrilla izquierda.
– Etiopía llenó el podio de los 10 mil metros, luego de la caída de Sifan Hassan. Gudaf Tsegay se hizo con el oro y fue escoltada por sus compañeras Letesenbet Gidey y Ejgayehu Taye.
– Estados Unidos se coronó en el relevo mixto de 4×400 con récord mundial (3:08.80), luego de un espectacular cierre de Alexis Holmes.
– El canadiense Ethan Katzberg mantuvo el ritmo de la clasificatoria y se colgó el oro en el lanzamiento del martillo con record nacional (81,25)
– Noah Lyles, de Estados Unidos, fue el más rápido de la final de 100 metros con un 9.83 segundos, el mejor registro de la temporada.
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