El Complejo Escultórico Comandante Ernesto Che Guevara de la ciudad de Santa Clara recibió la condición Colectivo Distinguido Nacional, máximo reconocimiento que otorga el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Administración Pública (SNTAP), logro que obtiene por segunda ocasión.
Orelvis Hernández, secretario general del SNTAP en Villa Clara, resaltó la labor abnegada del colectivo por conservar, preservar y divulgar la obra humana del Che y sus compañeros de lucha, así como la formación de valores culturales, éticos, patrióticos e internacionalistas en quienes concurren a la institución al dar a conocer a visitantes nacionales y foráneos, la vida y obra del Guerrillero Heroico.
Dicha institución, que acumula ya más de 5 millones 600 mil visitantes de múltiples países del mundo, ha sido galardonada con la condición de Vanguardia Nacional y la Medalla Lázaro Peña de II grado, entre muchos otros estímulos.
Osnay Miguel Colina Rodríguez, miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y su primer secretario en Villa Clara e Isael Rodríguez Rodríguez, miembro del Buró Provincial de la organización en la esfera político-ideológica, presidieron la entrega del reconocimiento.
El solemne lugar
El solemne lugar conmueve. Es templo al valor y al arrojo. El Che, hecho historia y presencia, está “en todas partes”: en el bronce de su estatua, en el mármol de su nicho, en las lajas del piso del Memorial, en las flores que lo rememoran, en la llama que lo eterniza…
Junto a su nicho puede sentirse estar en la selva boliviana, en el campamento que quedó desolado aquel octubre de 1967, para cambiar cuando una luz en forma de estrellas destella exactamente la bóveda del Che
Allí el mármol en bruto de sus paredes, las vigas de madera sin pintar que se entretejen en el techo, las piedras del piso, la vegetación y el río que puede ser el Ñancaguazú o El Grande, transportan al visitante a esa Latinoamérica guevariana que sigue siendo esperanza y fuerza.
Hasta allí llegan los visitantes para confesar íntimos secretos, no importan credos, etnias, razas, hombres o mujeres de cualquier parte del mundo le obsequian flores y reverencian respeto, pueden ser deportistas, científicos, estudiantes, otros que parten a cumplir misiones tras su inspirador ejemplo se despiden de él, para luego regresar y contarle sus hazañas. También hasta él llegan los sobrevivientes de las épicas batallas que protagonizó: sus propios combatientes.
En el Complejo Escultórico, descansan desde el 17 de octubre de 1997 los restos mortales del Comandante Ernesto Che Guevara y sus compañeros de lucha en la guerrilla boliviana. Antes, el 28 de diciembre de 1988, se inauguró la Plaza y el Museo, posteriormente el Mausoleo del Frente de Las Villas. En resumen el Conjunto Escultórico lo conforma La Plaza, el Museo, el Memorial y el Mausoleo Frente Las Villas. Sus proyectistas fueron los arquitectos Jorge Cao y Blanca Hernández, el reconocido artista plástico José de Lázaro Bencomo (Delarra), fue el escultor de la estatua y los relieves.
La tribuna de La Plaza está presidida por la estatua en bronce del guerrillero que mira al Sur, que es decir al macizo montañoso del Escambray y hacia la América que amó y por la que luchó. Mide 6,80 metros y pesa 20 toneladas, su bronce fue recolectado por los pobladores de la ciudad, se fundió en los talleres de Planta Mecánica, fábrica que inauguró siendo el Che ministro de Industria.
A ambos lados de la estatua se encuentra un mural y tres jardineras. El mural posee 144 figuras a relieve de los guerrilleros que lo siguieron en las distintas gestas. En las jardineras se exponen memorables frases del Che. Dos fuentes en forma de estrella simbolizan su grado de Comandante y la insignia que siempre llevó en su boina. Alrededor de la plaza, 28 palmas (14 a cada lado) recuerdan el día y el año en que nació (14 junio 1928). El piso de la plaza es una alegoría a la unidad universal, son hombres de los diversos continentes dándose las manos y al pueblo de Cuba, muy específicamente al de Santa Clara que se concentra en este sitio en los más comprometidos acontecimientos.
En el Museo se exponen documentos, fotos y objetos de forma cronológica de su vida y la obra. Entre ellos el plato donde comió por última vez, la escultura del Che niño, réplica de la que se encuentra en Altagracia en Villa Nidia, el facsímile del diario del Che en Bolivia, entre otros.
El Mausoleo del Frente de Las Villas, conformado por 220 nichos, está dedicado a los combatientes del Directorio Revolucionario 13 de Marzo, del movimiento 26 de Julio y de la Columna 8 Ciro Redondo. Desde allí se observa la estatua de Delarra, ese Che vestido de campaña dirigiendo su tropa.
