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Ella encarna la humildad a los 90

Por Pedro Péglez González y Juan Carlos García Guridi

Foto: Cortesía de Juan Carlos García Guridi

Todos lo dicen: Esta poetisa, Encarnación de Armas Medina, nacida el 18 de agosto de 1933, hace honor a su nombre al encarnar la sencillez, aunque el primer apellido advierta sobre cierta fuerza telúrica que posee, incluso ahora que está a punto de cumplir los noventa años, los cuales seguramente le celebrarán allegados, compañeros de letras y admiradores, allá en su natal Jaruco —otrora perteneciente a la antigua provincia de La Habana—, en su actual provincia de Mayabeque y ojalá que se extienda a todo el país.

 

Encarnación junto con el presidente de la UNEAC en Mayabeque. Foto: Cortesía de Juan Carlos García Guridi

Porque bien lo merece. La conocí allá por el 2002, cuando ya estaba cerca de los 70 años y venía cada mes desde su terruño hasta La Habana Vieja para asistir como la primera a la tertulia Lira y verso, donde en una ocasión fue la principal poetisa invitada y su conductor Julito Cumberbatch la recibió con esta décima:

 

Jardín en pleno conuco
tiene que ver con el alma.
Nunca guerra, siempre calma;
magia su verso, no truco.
De Lira y Verso a Jaruco
amiga, madre, canción
es la rotunda emoción
que encarna con lozanía:
universo en poesía,
las armas de Encarnación.

 

Cobijados por aquellas tardes —y años— de versos y música, cierta vez la mencioné como Una Encarnación de armas tomar, y Modesto Caballero, vicepresidente del Grupo Ala Décima, le dedicó una semblanza que tituló La nostalgia de una mujer indescifrable. Tanta era la veneración, más que admiración, que ella movilizaba en nuestros pechos de poetas.

Por entonces también escribí, al valorar la presencia de varias poetisas habaneras como adelantadas del proceso de revitalización de la décima escrita —iniciado en Cuba entre fines de los 80 y principios de los 90— que quizás una confirmación de esa avanzada femenina fue, en 1994, la conquista del importante Premio Nacional Cucalambé por Encarnación de Armas Medina con su decimario Beso que desata luz, dado a la luz el año siguiente por la tunera Editorial Sanlope.

Hoy apunto que el aserto vale, y vale en dos sentidos: Fue confirmación de esa presencia y lo fue además de la valía alcanzada en el discurso estético de esta autora, en la poesía escrita en general y en la décima en particular. Obras suyas posteriores lo corroboraron, y valga como botón de muestra la última estrofa del poema que da nombre a su decimario Abril no tiene la culpa (Cuadernos La puerta de papel, 1998):

 

Abril no tiene la culpa
que casi escondas el fuego.
No sé si deambula un ruego
donde cabe una disculpa.
Costra de sueños sin pulpa
para un viernes en espera.
Abril busca la manera
de ser ala y poesía.
Tú no estás y todavía
existe la primavera.

 

Su consagración como escritora ha sido ejemplar. En el 2009 fue la ganadora del primer concurso nacional de glosas Jesús Orta Ruiz, el Indio Naborí, la única cita literaria en que se compite glosando versos del autor de Viajera peninsular, lauro que mereció por su obra Soliloquio en la distancia, la cual se inicia con la siguiente estrofa:

 

Poeta, pido a la muerte
en abstinencia de luto,
que me conceda un minuto
el privilegio de verte.
Quiero conocer tu suerte
donde el tiempo deshilvana
un susto de arruga y cana
del humano desnivel,
y palpar sobre mi piel
tu proximidad lejana.

 

Con total merecimiento, su provincia de Mayabeque le dedicó en el 2017 su capítulo de la Feria del Libro. Ahora, el presidente del Comité Provincial de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, el poeta e investigador Juan Carlos García Guridi, empeñado en preparar el más que justo homenaje por esos 90 abriles de la poetisa, nos hace llegar su curriculum vitae, que revela la asombrosa hoja de servicios de la poetisa jaruqueña y preferimos añadir íntegramente a este comentario:

 

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Flora Encarnación de Armas Medina (Jaruco, 18 de agosto de 1933). Poetisa y maestra de tantos jaruqueños que la respetan y admiran. Licenciada en Maestros Primarios, desempeñando su labor de maestra por más de 30 años y Fundadora de la Emisora Radio Jaruco.

Se desempeña escribiendo poesía, décima, narrativa, ensayo y literatura para niños. Escribe y asesora el programa campesino Fiesta en la Cooperativa de la Emisora Radio Jaruco. Realiza lecturas de obras poéticas en actos, festivales, peñas culturales, eventos de repentistas y eventos de literatura a nivel municipal y provincial. Ha participado como jurado en jornadas Cucalambeanas y competencias de improvisadores municipales, provinciales y nacionales.

Participa en actividades de las distintas instituciones culturales tanto en el municipio como en otros municipios de la provincia y otras provincias, en museos, librerías y casas de cultura. Se ha destacado en la participación en eventos y festivales entre los que podemos citar: XII Festival de la Cultura Caribeña en Santiago de Cuba, el Encuentro Provincial de Escritores en San José de las Lajas y la Unión de Escritores de la Décima en el Festival Iberoamericano y encuentros de talleres literarios Radio Jaruco, Radio Camoa, Radio Cadena Habana, Radio Progreso, Radio 26 y Radio Rebelde.

Ha participado en los eventos del Fórum de Ciencia y Técnica Municipal, así como de la ANIR a nivel provincial. Su poesía engalana todos los años el Simposio Municipal «Asalto e Incendio de Jaruco».

Se ha distinguido su presencia en la Feria Internacional del Libro en el Día de los Autores Habaneros sito en la Cabaña 2010 y Lecturas de Mesa para niños. En Cuba Disco 2010 y en la Peña de la UNEAC Nacional.

Labora continuamente con la Dirección Municipal de Educación como tutora de maestros emergentes de primer grado.

Pertenece a varias instituciones dentro de las que se destacan: El Grupo Silvestre de Balboa de la Casa Canaria, el Proyecto Mujer y Poesía de la provincia La Habana, la Asociación de Pedagogos de Cuba, la Asociación Cubana Amigos del Libro, la Fundación Nicolás Guillén y la Sociedad Cultural José Martí.

Se destacan sus publicaciones nacionales en el Periódico El Habanero, Revista Panorama, Revista Iris, Revista Décimas Cubanas, Boletín Isleño Asociación Canaria y publicaciones municipales y provinciales.

También tiene publicaciones extranjeras en la Revista Universal de México en el año 1992 con «Plegable Mujer» y «La Llave de Cristal y Espuma», en la Revista El indio de Jurama de España con «Décimas Flores de Ronda» y Poesía Infantil y en la Revista Azahar de España en el año 2007.

Ha recibido las distinciones Premio el CONDAL de la Imprenta de Jaruco Prosa en 1944, Diploma del Centro Provincial de Aficionados y Casa de la Cultura Habana, ICRT por 10 años trabajando en el programa Anochecer Campesino, de la Asociación de Escritores de la UNEAC en 1991, por los 30 años de la Emisora Radio Jaruco, por la Cátedra Martiana de Jaruco, por la Unión Árabe de Cuba, por su participación en el IX premio de literatura ABDALA en el 2007 y los entregados por las distintas organizaciones de masas y políticas como el PCC, los CDR, ANAP, FMC. Recibió la medalla de permanencia en esta última organización. Cuenta con el Sello Aniversario 60 de la UNEAC.

Recibió la Distinción como Hija Ilustre de la Ciudad Condal de Jaruco otorgada por el OLPP en el año 1996, el Sello Lacrado del SNTC, Certificados por la participación en el Primer Coloquio Mujer y Poesía de la UNEAC en el 2005, Reconocimiento de la Dirección Provincial de Asociación de Escritores de Cuba por su participación en el Concurso «Che 80» en el 2008, premios en programas de festivales de radio. En 2005 la Dirección Provincial de Cultura y el Centro Provincial del Libro y la Literatura de La Habana le otorgó el Premio Pupila Insomne, por la obra de toda la vida; y en 2022 el Comité Provincial de la UNEAC de Mayabeque le entregó el Premio Cúspide, por la obra de la vida.

En 2019 se alzó con el Premio en la primera edición del Concurso Provincial de Décima Escrita «Juan Carlos Garrote Gil In Memorian», convocado por el Comité Provincial de la UNEAC en Mayabeque; entre otros importantes galardones.

Tiene publicados los libros «Tengo un ala», Editorial La Puerta de Papel, 1991; «Beso que desata luz», Editorial Sanlope, 1995; «Abril no tiene la culpa», Ediciones Unicornio, 1998; “Atisbos desde el desvelo», Ediciones Unicornio, 2002; y «Para después de mañana», Ediciones Montecallado, 2016, entre otros.

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