“Sin audacia no se podrá transformar la prensa cubana, ni se podrá transformar nada en Cuba”, dijo hace pocos días en entrevista Ricardo Ronquillo Bello, presidente de la Unión de Periodistas de Cuba, palabras que sin dudas cobraron mayor dimensión en ocasión hoy en el teatro Martí, de La Habana, del festejo central de la prensa cubana por los 60 años de su organización, la Upec.
En sencilla y acogedora ceremonia, encabezada por Esteban Lazo Hernández, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y Roberto Morales Ojeda, secretario de organización del Comité Central del Partido, ambos miembros de su Buró Político, la Upec en todo el país recordó su fundación, a la vez que repasó las numerosas tareas que acometen sus casi tres mil afiliados en momentos de crisis económica y profundización de los ataques contra la Mayor de las Antillas.
En las palabras centrales del acto Ronquillo Bello recordó que en los momentos de la fundación de la organización se venía abajo un mundo decadente, que por etapas se transfiguraba en tiránico, contra el que se había levantado una decorosa generación martiana con los asaltos del 26 de julio de 1953.
“En aquella fecha no solo nació una organización absolutamente nueva por su naturaleza en el continente, sino que además se proponía el sueño de fundar un tipo distinto de periodismo: aquel en que se dejaba de servir al provecho de los de arriba para defender los derechos de los de abajo, de aquella masa “sufrida” que Fidel había reivindicado en su alegato La historia me absolverá”, agregó.
Dijo que “somos herederos de una tradición que comenzó por el Padre Félix Varela y continuó, en sucesión honrosa, con el Apóstol José Martí, con Juan Gualberto Gómez, Julio Antonio mella, Pablo de la Torriente Brau, Ernesto Guevara y Fidel Castro Ruz”.
El presidente de la Upec refirió que además de cronistas de la Revolución, los periodistas somos defensores de su verdad, su limpieza moral y ética, han sido y son sus hacedores, desde los días de fundación hasta estos tiempos de reajustes y rectificación.
Precisó que el periodismo nuevo que pedían los fundadores de la Upec es todavía una causa inconclusa. “Fidel consideró siempre que el error es preferible al silencio en la Revolución y que la mudez, el vacío de nuestras posturas, el triunfalismo paralizante, acomodaticio y desmovilizador o la propaganda vacía, sin conexión con la complejidad de la vida real, es el mejor regalo que podemos hacerle hoy a la narrativa neocolonizadora contra Cuba».
Subrayó finalmente que «el mundo y el país son otros, la escala de los desafíos cambió, nos debemos muchas respuestas para inquietantes preguntas, pero sesenta años después de aquel 15 de julio de 1963, con la Revolución en el poder y nosotros con ella, lo que no puede cambiar es la energía, el arresto y la esperanza de nuestros fundadores. Esa es la garantía de nuestra unión en la era de la fragmentación”.
Agasajan a fundadores de la Upec
Durante el acto, le fue entregada la Moneda Conmemorativa Aniversario 60 de la Upec a un nutrido grupo de fundadores y fieles colegas encabezados por Tubal Páez, Presidente de Honor de la organización de los periodistas cubanos.
Rogelio Polanco, miembro del Secretariado del Comité Central y jefe de su Departamento Ideológico, entregó a la Upec a nombre de Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Primer Secretario del Partido, el reconocimiento de la organización partidista con una frase de Fidel: “Ténganme por uno de ustedes”.
A su vez Ulises Guilarte de Nacimiento, secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba y miembro del Buró Político del Partido, entregó a la Upec el Sello 80 Aniversario de la CTC, la Federación de Mujeres Cubanas y el Instituto de Información y Comunicación también agasajaron a los periodistas en su aniversario.