Con legítimo orgullo los santiagueros se suman a las acciones de conmemoración por el Día de la Rebeldía Nacional motivados no solo por las profundas raíces históricas que entrelazan a este territorio con la gesta del Moncada sino también por el compromiso de presente y futuro a favor del desarrollo económico y social del territorio y el país.
Por estos días muchos son los colectivos laborales en los que se cumplen los planes pactados o se concretan iniciativas productivas y de servicios dedicadas con especial sentido a celebrar, además de la gesta heroica del asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, los 508 años de fundada la otrora Villa de Santiago de Cuba (25/7).
La terminación de nuevas obras de beneficio económico o social figura entre las acciones que tienen lugar por estos días de julio en los nueve municipios de la provincia, los cuales renuevan su imagen con el remozamiento de arterias y comunidades.
Con particular connotación el propio día 26 se recordará en esta tierra la epopeya heroica de la generación del centenario, iniciada en horas de la madrugada, bajo el liderazgo del joven abogado Fidel Castro Ruz, con el asalto a la segunda fortaleza militar en importancia del país, devenida primer cuartel convertido en escuela luego del triunfo de la Revolución.
El homenaje de recordación a la fecha también se hará presente en otros escenarios santiagueros vinculados a los acontecimientos de julio de 1953, entre ellos la granjita Siboney, el antiguo hospital civil, hoy mueso Abel Santamaría, y el Retablo de los Héroes, en el cementerio de Santa Ifigenia, donde reposan los restos de muchos de los moncadistas.
En esos sitios, declarados muchos de ellos Monumento Nacional, se hacen intervenciones constructivas como parte de las labores de conservación, con mayor énfasis en el museo 26 de Julio, ubicado a escasos metros de la posta 3 del Moncada, punto donde se produjo el enfrentamiento armado de los jóvenes asaltantes y los soldados de la dictadura batistiana.