Sostiene Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, encuentro con jóvenes del sector de las telecomunicaciones. Fue en el Parque Científico Tecnológico de La Habana en la tarde de este viernes, jornada que calificó como «la mejor cosa que le había pasado esta semana»
«Gracias por la honestidad, la sensibilidad, el compromiso con el desarrollo del país y la solución a los problemas de la gente», expresó el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, a una representación de jóvenes del sector de las telecomunicaciones, con quienes sostuvo este viernes en la tarde un encuentro que calificó como «la mejor cosa que le había pasado esta semana».
Dando continuidad a sus intercambios con los diferentes sectores de la sociedad cubana, el Jefe de Estado interactuó con ellos por unas tres horas, sin guiones de ningún tipo, en uno de los espacios del Parque Científico Tecnológico de La Habana, ubicado en los predios de la Universidad de Ciencias Informáticas (UCI).
Participaron en la cita jóvenes del sistema empresarial y presupuestado del Ministerio de Comunicaciones, de la Unión de Informáticos de Cuba, de los Joven Club de Computación, de proyectos incubados en el parque científico, de Correos de Cuba, de ETECSA, del sector no estatal, de XETID y otras entidades.
En un ambiente que calificó «de innovador y de compromiso», la titular del MINCOM, Mayra Arevich, argumentó sobre cómo los trabajadores de la informática y las telecomunicaciones, en especial los jóvenes, trabajan insertados en el concepto de resistencia creativa defendido por el Presidente de la República, y así enfrentar las afectaciones de un bloqueo recrudecido que deja al sector pérdidas por más de cien millones de dólares anuales.
Anays O´Farril Veranes, directora jurídica del MINCOM y secretaria general del comité de la UJC en el organismo, subrayó el espíritu al que convocó el Presidente para este encuentro, dirigido más que todo «a las cosas que nos faltan por hacer y podemos hacer por mejorar nuestra realidad».
Habló del trabajo de sus contemporáneos en el MINCOM para transformar esa realidad, desde lo técnico, lo político, lo ideológico y lo comunitario, como la presencia que tienen en los barrios en transformación, donde han contribuido a un cambio de actitud entre la gente, que ya no solo espera por que le hagan, sino que se suman, se incorporan al trabajo o vuelven a las aulas.
O´Farril Veranes se refirió además a los problemas de los jóvenes del sector, como el sistema salarial, en su caso en el sector presupuestado, lo que está conduciendo a una constante fluctuación laboral, situación igual de recurrente en el sistema empresarial, como se explicaría luego en otras intervenciones.
Respondiendo a la insistencia de Díaz-Canel en cómo es el trabajo con los jóvenes en el sector, de si se les facilita la superación, de si se les escucha, de si se les prepara como cuadros…, José Carlos Cruz Sandoval, director de los Joven Club de Computación, se refirió al sistema de trabajo del MINCOM con los jóvenes como «establecido y muy bien estructurado».
Al abordar la labor de los Joven Club en el país, explicó, entre otros asuntos, sobre el fomento de la robótica educativa en esas instalaciones. Ya se disponen, dijo, de 18 laboratorios de ese tipo, uno en cada provincia, excepto en La Habana, donde hay tres; y ya han pasado por esos recintos alrededor de 5 000 personas.
El desarrollo de esta vertiente de las nuevas tecnologías está limitado por la disponibilidad de recursos, aunque es paliada por el apoyo de un programa de la UNESCO, el que permitirá la apertura de otros 13 laboratorios de robótica educativa en los próximos tiempos, informó el joven.
Cruz Sandoval subrayó el precepto que siguen los Joven Club de que la disciplina tenga un impacto en las comunidades y el desarrollo local. Un ejemplo son, argumentó, las zonas rurales, donde los esfuerzos deben dirigirse hacia la agricultura y fomentar esa vocación en los niños de esas localidades ante las perspectivas demográficas del país, donde la transformación digital, la automática y dentro de ella la robótica, serán fundamentales, como subrayaría más adelante el Presidente de la República.
El director de los Joven Club de Computación también habló de insatisfacciones, como la necesidad de seguir incrementando la preparación de la población en lo referido al gobierno y el comercio electrónico, incluyendo a los adultos mayores, porque los nativos digitales, dijo, lo hacen de forma natural. Debemos lograr, añadió, no solo una cultura en esto, sino que la gente la use.
Otra insatisfacción añadida por Cruz Sandoval, en representación de su institución, fue que organismos y administraciones locales y territoriales aún no han concientizado que los abultados flujos de trámites y otras gestiones tienen su respuesta en lo digital.
Todavía hay incomprensión —insistió— en que lo digital acelera los procesos, y las condiciones —dijo— están creadas para ello, como es que hay más de 7 000 000 de líneas móviles y Transfermóvil tiene más de 4 000 000 clientes.
Frank Cruz Valbuena, especialista principal de Transfermóvil, celebró los ocho años de este proyecto y el trabajo en él de más de una veintena de personas, todas menores de 35 años de edad, aunque solo empezó con dos especialistas. Subrayó que esta plataforma facilita la realización de unos 60 trámites de forma digital.
Allan Pierra Fuentes, uno de los directores de proyectos de la UCI y líder de ToDus, el cual está incubado en el Parque Científico-Tecnológico de La Habana, comentó una característica del desarrollo de estas ciencias en nuestro país: «la soberanía tecnológica, un concepto de los técnicos y profesionales del sector graduados en Cuba. Un sentir —expuso— que se creó en todas las universidades cubanas que imparten estas carreras».
Subrayó también que estas ciencias son esencialmente disruptivas, por lo cual se opuso a la «informatización de la burocracia». Es decir —explicó— que toda la tramitología que realizan las personas se lleven a lo digital sin cambiar nada, sin eliminar la mayor cantidad de trámites posibles. Cada cosa que nosotros hacemos, añadió, termina con una pregunta, ¿qué murió?, ¿qué proceso se dejará de hacer por esto que hicimos?»
Yadainy Betancourt Rodríguez, de XETID, también desde el concepto disruptivo de estas ciencias, comentó sobre el papel de los jóvenes versados en estas materias en la transformación de los barrios junto a las entidades enclavadas en ellos.
Habló de ayudar en la educación de las personas en las comunidades, de enseñarlas a utilizar las herramientas digitales y también de controlar y apoyar a las entidades que prestan bienes y servicios, como las bodegas, para que no eludan el uso de las0 mismas por desconocimiento u otras intenciones.
También comentó sobre lograr interconexiones entre los productores que están resolviendo hoy problemas medulares relacionados con estas tecnologías y no seguir gastando recursos en pequeños compartimientos.
Elizabeth García Cuesta, directora de desarrollo del Grupo Empresarial de la Informática y las Comunicaciones, coincidió más adelante con este criterio, al denunciar que la industria tiene muchas soluciones, pero no se están utilizando, como es el caso de la firma digital, un procedimiento aprobado por ley, pero que muchas entidades rechazan, incrementando las demoras, la papelería, la burocracia. E igual pasa con los sellos de timbre digitales.
De otros proyectos, de otras trabas y de muchas soluciones, se habló en el encuentro del Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República con jóvenes del sector de las telecomunicaciones, a quienes les habló emotivamente y de manera muy franca.
Al resumir la vivencia del encuentro, Díaz-Canel escribió en el libro de visitas de la institución que sirvió de sede: «No olvidaré nunca este día ni la visita a este apreciado Parque Científico Tecnológico de La Habana en la UCI. Hemos tenido la oportunidad de conocer sus avances y también sus sueños.
«Además hemos sostenido un aportador encuentro y debate con jóvenes del sector de las telecomunicaciones. En fin, vivimos una jornada de aprendizaje, aportes, visiones y de mucho compromiso revolucionario».
Sobre el desarrollo de este parque científico tecnológico, en diálogo final rodeado por los jóvenes, les comentó:
«Hace tres años no teníamos esto, hace tres años decíamos, “bueno, cómo vamos a destrabar el tema de la vinculación ciencia-empresa; cuándo vamos a tener un parque tecnológico, cuándo los científicos van a recibir (ingresos) de los proyectos de ciencia…”,
«Y todo eso lo hemos ido (destrabando) y lo probamos en el peor momento, el de la COVID. Lo pusimos a punto en la COVID y ahora los podemos extender todos los años; (lo que demuestra) que siempre se puede más; que siempre se puede más si nos lo proponemos».
Participaron en el intercambio, además, los miembros del Secretariado del Comité Central del Partido, Yudí Rodríguez Hernández y Joel Queipo Ruiz, el viceprimer ministro Jorge Luis Perdomo Di-Lella y el ministro de Educación Superior, Walter Baluja García, entre otras personalidades.
