San Salvador.- Juan Ramón Milán Ponce lleva un mundo en el boxeo. Su nombre tal vez no le sea familiar a muchos, pero si le digo el “chino” Milián entonces la familiaridad asomará a sus ojos.
“Estoy de director de jueces y árbitros de la competencia del boxeo en San Salvador 2023 y evaluador también. Es un alto honor y mucha responsabilidad, acá estoy representando a Cuba. Demostrando el nivel que tenemos, gracias a lo fuerte que trabajamos”.
El chino reconoce la duro de la tarea. No resulta fácil desempeñarse en una función donde es necesario transparencia y profesionalidad.
“No paro, tengo la misión de dar seminarios, revisar el trabajo de los jueces. Es necesario formarlos bien. Ellos son una de las caras del boxeo. Su preparación es fundamental”.
“Que la Confederación Panamericana de Boxeo me haya elegido para esta labor ratifica el prestigio de los árbitros cubanos. Llevo 10 años en estos trajines. Sino trabajáramos bien, por supuesto que no nos tendrían en cuenta”.
Nuestro entrevistado reconoce el nivel del arbitraje nacional en el pugilismo, Se lo ha ganado y no ceja en mejorar.
“En Cuba somos cuidadosos con la preparación. Se hacen seminarios con regularidad y rigor. No solo participan en ellos los 31 árbitros internacionales que tiene el país, sino los que tiene la categoría nacional”.
El “chino” Milián afirma que jamás imaginó llegar a manejar tamaña responsabilidad, sin embargo, la ha asumido como quien se enfoca en algo que ama con pasión.
“El boxeo es un como un bichito que te atrapa. A un montón de cubanos nos gusta y a los que no, se saben al menos los nombres de los muchachos de la selección nacional. Este deporte nació para gente como nosotros. Luchadores, siempre guerreros.
