La de este martes fue una tarde de tormenta en Jobabo, evento meteorológico que se ha ensañado con ese territorio del sur de Las Tunas, pues “es la tercera incidencia de este tipo registrada en el municipio desde el 26 de abril pasado, sumando ya casi un centenar de afectaciones similares a las ocasionadas por las inundaciones de la segunda semana de junio (…)”.
Así lo confirma el periodista de la emisora Radio Cabaniguán, Yaidel Miguel Rodríguez Castro en el sitio digital de esa planta local, quien reseña que según datos preliminares la tormenta local severa, muy típica en esta época del año, dañaron nueve viviendas, de las cuales dos reportan daños totales de techo y otras seis con averías parciales en sus cubiertas, y una pared derrumbada.
La reseña relaciona, además, las fuertes rachas de viento derrumbaron árboles y gajos que cayeron sobre cerca perimetrales, y tendidos eléctrico y telefónico que interrumpieron esos servicios.
Y en ese tema vale una reflexión, porque entre las medidas de los planes de reducción de riesgos está la poda oportunas de árboles que devienen peligro potencial, también, para edificaciones, caminos y hasta para la vida de las personas, y en oportunidades no se acata esta indicación de la Defensa Civil que tiene el objetivo de mitigar vulnerabilidades.
Según el reporte noticioso, las principales afectaciones se registraron en el reparto Vietnam, aunque en Argentina Sur se hicieron sentir los embates del fenómeno natural, que en los meses de verano suelen ser recurrentes.
Tan pronto como cesó el embate, se activaron el puesto de Dirección del Gobierno Municipal y los grupos de trabajo comunitario de las circunscripciones para valorar daños y coordinar las acciones de recuperación.
El relato da fe de la visita, esa misma jornada en la noche, de autoridades locales y de los técnicos de la vivienda para precisar las afectaciones en los inmuebles y proyectar soluciones posibles con los recursos con que cuentan en la demarcación y solicitar apoyo a la provincia.
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