Aunque el espíritu de resistencia del pueblo cubano y, en especial, de su clase obrera es tangible en todas las esferas de la vida, su expresión cimera está en los centros laborales, tanto de la producción como de los servicios, donde hacen posible hasta lo imposible para sostener los más complejos procesos en todos los sectores.
Y como una señal para quienes creen que todo está perdido, los integrantes de la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores en el país, construyen, a fuerza de ingenio y entrega, un monumento a la resistencia creativa.
Así lo demostraron en Las Tunas sus protagonistas, hombre y mujeres sencillos, cuya labor casi anónima y en muchas entidades, por desidia o por irresponsabilidad, poco ponderada, salva obstáculos y aporta al desarrollo.
La segunda edición de la exposición Soluciones Cuba 2023, colmó de realizaciones las extensa áreas del palacio provincial de Pioneros José Martí, ubicado en la periferia de la ciudad, de innovaciones y racionalizaciones que demuestran cómo sus asociados hacen de sus puestos laborales trincheras desde las que enfrentan todos los días el rigor del recrudecido bloqueo de los Estados Unidos y el impacto de la crisis económica.
A la cita acudieron más de 160 entidades del territorio y una cifra superior a los 300 aniristas con las muestras de trabajos que ya rinden frutos, en las industrias azucarera, ligera, energética y metalúrgica, la Educación, la salud…
Sus hacedores, convocados por la Anir, llegaron, y exhibieron y explicaron soluciones concretas que sustituyen importaciones, dinamizan procesos, devuelven la vida útil a máquinas, aprovechan desechos para elaborar nuevos artículos, recuperan piezas de repuesto… con significativos aportes a la economía del país y hacen sostenibles el trabajo.
Por ejemplo, el ingenio de Eliécer Castro Sosa, innovador destacado y presidente del Comité de Innovadores y Racionalizadores (CIR), de la empresa agroindustrial azucarera Antonio Guiteras, de Puerto Padre, hizo posible la solución al problema que presentaban las centrífugas chinas para extraer el azúcar ya con carácter comercial que se ha generalizado en centrales de Las Tunas, Ciego de Ávila y Holguín, y en la refinería Héctor Molina , de La Habana. Por ese trabajo, entre tantas otras innovaciones, Eliécer está propuesto al Premio Nacional de mayor impacto económico que entrega la Anir.
Salvador Sariol Vistorte, director del Departamento de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera del gobierno provincial, pondera esos esfuerzos y esos resultados, porque alivian, en parte, las presiones de la difícil situación económica que vie la nación, “sustituyen importaciones y ayudan a enfrentar y vencer los obstáculos del bloqueo, pues a veces tenemos el dinero, pero esas trabas nos impiden adquirir lo que necesitamos”, comenta.
“Ahí están las soluciones a muchos de esos problemas en las fábricas, la cultura, el transporte, y esa respuesta es parte de la solicitud del país de evaluar cómo sustituir importaciones, cómo disminuir los costos.”, reconoce.
En tanto, Luis Hugo Negret Pérez, miembro del Buró Nacional de la Anir, asegura que ha cumplido el objetivo de que los diferentes actores económicos conozcan el potencial innovador con que cuenta el territorio con el propósito, además, de generalizar las mejores experiencias”.
Yaneicy Ávila Escalona, presidenta del Buró provincial de la Anir, insistió reconoció el rol de los asociados en el complejo escenario actual y los convocó a continuar aportando desde la innovación y la racionalización al objetivo de procurar el desarrollo económico y el bienestar social”.
