Garantizar la producción de alimentos para el suministro a la población, la industria y otros sectores claves como el turismo, es una de las prioridades hoy del Gobierno de Bayamo, principal ciudad de la provincia de Granma, para lo cual se apoya en los Proyectos de Desarrollo Local, los que centran su afán en la actividad agropecuaria.
Aseguran autoridades de ese órgano administrativo que para un resultado positivo del necesario autoabastecimiento, los tres esquemas de ese tipo existentes deben lograr mantener, por ejemplo, unas 2 mil codornices ponedoras, de las que se obtengan aproximadamente 500 mil huevos al año.
Ese producto alcanza una alta demanda en la población debido a su rico contenido proteico por lo que se recomienda su consumo a niños, embarazadas y pacientes anémicos por déficit de hierro.
Para consolidar la reproducción de esas aves se trabaja incesantemente en la construcción de las naves y el resto de las condiciones que favorezcan el proceso.
La venta de gallinas semirústicas, unas 10 mil, es parte también de los propósitos, así como la comercialización de 300 mil pollos de crías de ceba a productores.
En cuanto al programa porcino, muy deprimido aún, se pretende del mismo modo desarrollar su crecimiento, para lo cual se le otorga preferencia mayoritaria a la raza de capa oscura por su fácil adaptación a cualquier medio y su resistencia a enfermedades.
Entre los términos de los PDL de este tipo para su establecimiento destaca que deben ser autosustentables. La producción propia del alimento animal con recursos naturales y desechos de la industria alimenticia es ineludible a fin de evitar la dependencia de las importaciones.
El municipio Bayamo tiene una superficie destinada a la agricultura de más de 71 mil 350 hectáreas, de cuales una 11 mil se mantienen ociosas o deficientemente explotadas. De esa actividad los principales beneficios se obtienen de la ganadería, el tabaco, la caña, los granos y los frutales.
Por su parte los Proyectos de Desarrollo Local se establecen como vía para lograr una participación activa de los Consejos de la Administración, a estas instancias, que integran estas propuestas a sus estrategias de progreso, con el aprovechamiento de los recursos endógenos y de las personas o grupos con capacidades para la realización de determinadas acciones.